Ciudad del Este, el contrabando y su reconversión

Para entender la problemática de Ciudad del Este y las soluciones para su actual crisis, tenemos que comenzar por un resumen histórico de cómo esta ciudad fronteriza se ha transformado de Ciudad Jardín turística hasta 1983 en la capital del contrabando actual.

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Wagner Enis Weber (*)



Resumen histórico

¿Fue Ciudad del Este una planificación para tornar la economía paraguaya en una economía de triangulación, o el crecimiento fue casual?

En la década del 80, el continente todo, a excepción del Paraguay, había ingresado al FMI y se había sujetado a políticas recesivas, siendo el cierre de las importaciones de estos países el responsable por la más grave crisis inflacionaria de su historia.

Así, la única oportunidad de los habitantes de los países limítrofes de acceder a productos de más nueva tecnología, de bajos precios, sin quedarse en el mundo de las cavernas, era irse al Paraguay, uno de los únicos países en Suramérica y de los países en desarrollo, con política de apertura comercial, con libre importación-exportación de mercaderías.

Pero también había el hecho de que mientras el tiempo pasaba, los países que estaban en el FMI se iban empobreciendo, con aumentos de desempleo y caídas de renta.

De esta manera, las personas que antes iban a Ciudad del Este para comprar computadores y otros electrónicos para uso personal, encontraban en este comercio una nueva fuente de renta, una vez que los amigos pedían a la gente que se iba al Paraguay para comprarles productos electrónicos.

Con el pasar del tiempo, y la profundización de la crisis, estas compras que se hacían a los “amigos” ya comenzaban a tornarse una profesión, y la gente comenzaba a viajar solamente para hacer compras para la reventa en Brasil, lo que ha creado el conocido Turismo de Compras o triangulación, que resiste con fuerza hasta hoy.

De una hora a otra, las calles fronterizas paraguayas se llenaron de miles de personas deseosas de comprar mercaderías para revenderlas en el mercado brasilero, con el fin de paliar un poco la crisis.

Pasado el tiempo, estas personas hicieron de estos viajes de compras su profesión, siendo que grande parte de ellas se tornaron grandes empresarios “al por mayor” de mercaderías de contrabando en Brasil, las cuáles revendían a la creciente cantidad de comercios informales “por menor” en los 5.000 municipios brasileros.

Se desvirtuaba de esta manera, la política de cuotas para viajeros a países extranjeros, que en la época estaba en USA 500,00/persona, para comprar productos importados para uso personal.

Es importante remarcar, que las cuotas que los países le dan a sus ciudadanos en el extranjero, y no solamente en Brasil, es exclusivamente para consumo propio, y jamás para reventa de estos productos dentro de los territorios nacionales, lo que sí causaría una grande concurrencia desleal a la producción local de cualquier nación.

Por lo tanto, el surgimiento del comercio de triangulación no fue resultado de un “plan” del gobierno paraguayo para crear el comercio de triangulación, pero sí una circunstancia causada por el empobrecimiento, tanto de la población brasilera como la argentina.

De esta forma, Ciudad del Este se ha tornado en los últimos 20 años, en el escape para millones de personas en los dos grandes países para la salida de la pobreza, y mejoría de la calidad de vida de su gente.


Quiénes ganan con la triangulación China-Ciudad del Este-Brasil

1.Los industriales chinos.



Ciudad del Este se ha tornado la puerta de entrada ilegal principal de las mercaderías industrializadas chinas al gran mercado brasilero, sin pagar ningún tributo, causando perjuicios multimillonarios a las industrias y trabajadores de Brasil y Paraguay.

Por Paraguay ingresan al Brasil el equivalente a 100 millones de CDs (75% del consumo brasilero), 80 millones de piezas de ropas (10% del mercado brasilero), 40 a 50 millones de pares de calzados (8 a 10% del mercado brasilero), sin hablar de los componentes informáticos y demás electrónicos, gran parte de ellos falsificaciones de marcas famosas.


2.Importadores paraguayos ilegales.


Importadores de productos chinos en Paraguay que, para ganarse 100% de lo que comercializan, subvaloran las mercaderías o ni pagan los tributos.

Son generalmente extranjeros que ni siquiera viven y dejan su dinero en Paraguay, o mismo paraguayos que consiguen por lo escrito arriba, un enriquecimiento ilícito a base de la evasión de impuestos internos y sacrificio de industrias paraguayas, las cuáles tienen que soportar la competencia desleal de los industriales chinos.


3.Los comerciantes extranjeros de Ciudad del Este.


En la mitad de los años 1980, por el crecimiento absurdo del comercio de sacoleiros, miles de comerciantes extranjeros, especialmente brasileros, árabes y chinos, desplazaron a los comerciantes locales que ahí se encontraban desde los años 1960, e instalaron sus comercios especializados en productos baratos, especialmente chinos y falsificados para reventa a los compristas brasileros.

Las principales características de estos comerciantes son:
3.a No viven en Paraguay, sino en Foz o por un tiempo nomás ahí, hasta desplazarse con sus riquezas a otras partes, como EUA. Revenden después de un cierto tiempo sus negocios a otros “patricios”.

3.b No dan trabajo a paraguayos, sino a brasileros, ilegalmente, para no pagar la remuneración mínima vigente en Paraguay ni tampoco las cargas laborales o cumplir con el resto de la legislación laboral paraguaya.

3.c No invierten el dinero ganado en Paraguay, sino que lo envían a sus países de origen o a paraísos fiscales. Muchos de ellos depositan su dinero en los bancos brasileros, y ahí lo ponen para rendimiento, aprovechando que el gobierno brasilero paga las tasas de interés más altas del mundo, lo que les da a los inversores en papeles del gobierno en Brasil, una remuneración promedia de 1,2% mensual neta o arriba de la inflación. Sin trabajar.

3.d Desangran el Paraguay de dólares, juntamente con los importadores, una vez que las compras se venden en “reales”, la moneda brasilera, y no en dólares. Significa que se utilizan los dólares generados por Itaipú y los exportadores paraguayos para cambiar “reales” en dólares y los reenvían al extranjero. De esta forma, el dólar se encarece en Paraguay más de lo que tendría que ser, causando multimillonarios perjuicios a la nación.

3.e Fortalecen la corrupción en Paraguay y Brasil, una vez que se rehúsan a pagar los impuestos internos sobre el valor real de las mercaderías, subvalorándolas o sencillamente no pagando nada. Para su tranquilidad, coimean a funcionarios de todos los niveles estatales en ambos lados de la frontera, imposibilitando de esta manera un combate frontal a la corrupción. Es decir, los comerciantes extranjeros que revenden sus mercaderías a los sacoleiros son grandes responsables por los altos niveles de corrupción existentes en nuestros países.

3.f Ensucian el nombre de Paraguay en todo el mundo, una vez que no les interesa la organización de Ciudad del Este, ni su limpieza, ni nada que se relacione al desarrollo paraguayo, pero solamente a sus bolsillos. Si Ciudad del Este es una ciudad desorganizada, sucia, que ha vendido sus espacios verdes, hay que preguntarse quiénes son los que impulsaron la existencia de este verdadero “mercado persa” fronterizo. Quiénes son los dueños del dinero que mantienen esta situación.


Quiénes pierden con este comercio de contrabando

1. Las industrias paraguayas.


Con el comercio fronterizo de triangulación, Paraguay ha perdido la oportunidad de transformarse en proveedor de productos industrializados a consumidores brasileros a bajos precios.

Cuando un brasilero se va al Paraguay y compara los precios de productos industrializados paraguayos con productos vendidos en Brasil, como por ejemplo Curitiba, percibe una gran diferencia de precios a favor del consumidor paraguayo. ¿Por qué?

Porque la estructura tributaria paraguaya permite que un calzado de cuero de calidad, masculino, de la industria paraguaya llegue al consumidor final en Asunción a solamente G. 85.000 a G. 110.000 en promedio, mientras un similar en Curitiba cuesta no menos de G. 160.000 a G. 220.000.

Un pantalón de jean de marca hecho en Paraguay se puede comprar por G. 100.000, mientras en Curitiba sale a G. 200.000, y una camisa social de marca paraguaya que en Asunción nos cuesta G. 90.000 a G. 120.000, en Curitiba pagan casi el doble.

Ocurre que en Brasil, más de 50% de los impuestos son cargados sobre el consumo. Y tenemos una de las cargas tributarias más altas del mundo.

Por eso, cuando un producto brasilero es exportado, se queda mucho más barato afuera, una vez que no hay la carga de impuestos internos sobre consumo de Brasil. Además, el gobierno local devuelve al exportador el IPI (impuesto sobre productos industrializados), así como ocurre con el IVA en Paraguay.


¿Qué tienen que ver estos datos con Ciudad del Este y su comercio?


Los industriales paraguayos se quejan de que sus productos cuando llegan al Brasil son cargados de tantos impuestos, que pierden la competitividad que tenían en Paraguay.

Ocurre que si este industrial paraguayo utilizara del régimen de turismo de compras, que hoy está en US$ 300,00/persona, podría vender cerca de US$ 300 millones/año, solamente para los cerca de 1 millón de turistas que frecuentan las Cataratas del Yguazú anualmente.
Pero no pueden hacerlo porque los sacoleiros llenan sus bolsas de “productos chinos” para revender en Brasil.

Significa que, en lugar de beneficiar al industrial y trabajador paraguayo, el comercio de Ciudad del Este privilegia solamente a extranjeros, sean industriales o comerciantes.

Otro perjuicio causado se refiere a que una parte importante del remanente de productos baratos chinos, que son contrabandeados a Brasil, queda en el mercado paraguayo. Como estos productos ingresan subvalorados, sacan de competencia a industriales paraguayos.

Acabando con el contrabando o triangulación, los comerciantes que traen estos productos ya no se sentirán estimulados a importar solamente para el mercado paraguayo. Eso significa un aumento de la producción industrial local y, en consecuencia, el aumento de recaudación de impuestos internos, que reemplazarán a los impuestos aduaneros con ventajas, una vez que estos últimos se hacen en base a productos con precios irrisorios e irreales.

Solución al problema

a. La Unión Industrial Paraguaya, así como los gremios productivos, tienen que, en este momento, ocupar, de forma asociada y organizada, los salones vacíos que se quedaron y se quedarán en Ciudad del Este, a fin de potenciar la venta de los diversos productos industrializados paraguayos, tanto a los “turistas verdaderos” como a los habitantes de la región fronteriza, quiénes podrán, a partir de ahora, surtirse mensualmente con la cuota-régimen especial de compras de US$ 300,00/persona. Es decir, podrán comprar productos industrializados paraguayos sin tener que pagar los impuestos internos de Brasil, principalmente los de consumo.

b. El Congreso paraguayo tiene que hacer un esfuerzo para aprobar el Tratado que elimina la doble tributación entre los 2 países. Este tratado hará que los productos paraguayos ingresen al mercado brasilero con mucho más ventajas en términos de precios que los productos brasileros en nuestro propio mercado. En Brasil, el Congreso ya aprobó este tratado.

c. Las industrias que se instalaron en Paraguay, principalmente en la región fronteriza, como AKJ (capital árabe) para fabricar ventiladores o las industrias de PIO I, que se instalaron solamente con el objetivo de vender a los compristas brasileros y no exportar legalmente, tienen en este momento que ser estimuladas a legalizar su situación, registrando sus marcas en Brasil y montando lindas tiendas para los turistas en la región de los mejores shoppings, a fin de aprovechar la nueva situación.

Les damos algunos ejemplos que seguramente podrán aprovechar las industrias paraguayas.

Hoy día, Paraguay produce tanto bicicletas como motocicletas.

Durante 2 épocas del año, las criaturas sueñan con regalos:
El 12 de octubre (día de los niños) y la Navidad.

Una bicicleta en Brasil suele costar cerca de 30 a 40% más cara que en Paraguay. Eso significa una inmensa posibilidad de venta de estos artículos paraguayos a los turistas brasileros, sin tener que internalizar los impuestos en Brasil.

Otro ejemplo.

La cuota de turismo individual puede ser “sumada”. Eso significa que si se va una pareja al Paraguay, juntos pueden comprar 1 solo artículo de US$ 600.

Es el precio promedio de una motocicleta 125 cc hecha en Paraguay, y que sale casi USA 2.000 en Brasil, pues además del costo de producción vienen de casi 5.000 kilómetros de distancia al sur, es decir, desde Manaus, Amazonia.

Eso significa que las industrias paraguayas podrán vender, bajo la cuota de turismo, motocicletas hechas en Paraguay “sin pagar los impuestos internos” en Brasil.

d. El Gobierno paraguayo y los gremios de producción deben trabajar un cronograma para acabar con el régimen de importación temporal de turismo en Paraguay, principalmente para productos que pueden en el corto espacio de tiempo ser producidos localmente, como CDs o ensamble de computadores. Con eso, importadores y/o firmas extranjeras que hoy utilizan Ciudad del Este para vender a Brasil, se obligarán a producir localmente sus productos, sea a través de inversiones directas, sea a través de asociaciones con empresarios locales.


2. Los trabajadores paraguayos.

Actualmente, con el comercio de sacoleiros siendo explotado irregularmente por los comerciantes extranjeros, los trabajadores paraguayos tienen que trabajar bajo condiciones precarias, una vez que la preferencia es por los trabajadores brasileros ilegales.

Solución:
Este es el momento cierto para exigir a los comerciantes extranjeros, que sí tienen ya ventajas impositivas por la importación de diversos productos bajo régimen de admisión temporaria, que tienen que contratar, primero, a los paraguayos, legalmente.

Si no lo hacen, no podrán desempeñarse en el comercio fronterizo. Su licencia para instalar comercio en Ciudad del Este o otra región fronteriza estará suspendida definitivamente.

Al mismo tiempo, es hora de dar entrenamiento de cursos rápidos en Excelencia de calidad y Atención al cliente y al turista, cursos de lenguas como inglés, alemán y francés, a los trabajadores paraguayos en la frontera, una vez que el 30% de los turistas que llegan a las Cataratas del Yguazú son de fuera de Brasil, y la enseñanza de una lengua extranjera podrá potenciar a que cada vez más turistas no brasileros puedan visitar con tranquilidad el Paraguay.


3. Los comerciantes locales.

Los comerciantes locales, principalmente que se desempeñan fuera del microcentro de Ciudad del Este, siempre se quedaron rezagados del crecimiento económico de los compristas brasileros, una vez que no se dedican a vender a los sacoleiros, pero sí a los habitantes de Ciudad del Este y Foz.

Esta es una oportunidad de oro para potenciar a estos comerciantes, que sí viven e invierten en Paraguay.

Por eso, es importante hacer una planificación donde se prohíba el comercio en el microcentro de la ciudad, dejándolo para inversiones en restaurantes, casinos o lugares de esparcimiento.

Si la gente insiste en mantener comercio en esta región, el Gobierno paraguayo debe cobrar un impuesto diferenciado a todos los extranjeros con menos de 10 años de ciudadanía paraguaya, que querrán mantener comercio ahí.

Por ejemplo, la cobranza de un canon anual de USA 50.000 a cualquier ciudadano extranjero que querrá tener ahí su negocio.

O se podría exigir que el comerciante extranjero, mientras tenga su negocio ahí, sea obligado a mantener depósitos a largo plazo en equivalentes a USA 100.000 mientras mantenga su comercio en la frontera.

Eso posibilitará un sinceramiento local impositivo, mayor capitalización de los bancos locales para potenciar préstamos a largo plazo para inversiones, y también una mayor ventaja a los empresarios locales, que han sido rezagados del desarrollo local por los explotadores extranjeros.


4. El turismo receptivo en Paraguay.

Gracias al comercio de triangulación de productos falsificados, con la mala fama que acompaña a Paraguay, la suciedad de Ciudad del Este con su desorganización y la pésima imagen que todo el conjunto pasa al mundo entero, tanto los locales con potencial turístico natural de la región, como los Saltos Monday y Ñacunday, como el lago de Itaipú, margen paraguaya, como locales cercanos como las ruinas jesuíticas de Itapúa, la bella Encarnación, el turismo rural de Guairá con su hermoso Ybytyruzú y espectacular artesanía de Yatayty o locales de naturaleza privilegiada en Canindeyú, se quedan desconocidos no solamente de brasileros, sino del mundo.

Eso significa que cientos de miles de personas, que podrían estar ganando la vida con el verdadero turismo en todo el Paraguay, se quedaron rezagadas en los últimos 20 años para privilegiar a unos pocos, principalmente extranjeros, que ni siquiera viven en Paraguay.

Solución:
Con el fin de la confusión del Puente de la Amistad, el embellecimiento de Ciudad del Este con su consecuente reorganización urbanística, se posibilitará no solamente potenciar la llegada de los turistas que se quedan en Foz do Iguaçú, sino también dar vida al aeropuerto internacional Guaraní, el más grande y moderno de la región fronteriza.

Hasta el momento, este aeropuerto no puede ser utilizado por las empresas aéreas para llevar y traer turistas a la región por el caos vehicular generado por el tráfico de sacoleiros en el microcentro y el Puente de la Amistad.

No es posible hacer que los turistas que lleguen a partir del aeropuerto Guaraní se queden 2 ó 3 horas a la espera para cruzar a los hoteles de Foz o sus Cataratas.

Con la activación del aeropuerto Guaraní para pasajeros, surgirán oportunidades a que los taxistas locales ganen más dinero haciendo menos viajes pero más largos. Que empresas de turismo locales empleen a miles de trabajadores para llevar a estos turistas a los más distintos locales. Que los restaurantes y bares locales ganen vida. Que surjan hoteles-casino de nivel internacional en el camino del Aeropuerto, haciendo que con el tiempo la gente empiece a quedarse y hospedarse en Ciudad del Este, yendo a Foz solamente para visitar las Cataratas, pues en Paraguay tendrán mucho más actividades turísticas para aprovechar.

El fin del comercio de triangulación China-Paraguay-Brasil es la gran oportunidad de crear para Paraguay las condiciones ideales de crecimiento turístico sostenido hacía el nuevo siglo.


(*) Consultor de empresas por la Fundación Getulio Vargas de Brasil. Profesor universitario y autor del trabajo “Paraguay: Un milagro americano”.

e-mail@ wagner.enis@terra.com.br; ineespar@terra.com.br
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