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La Asociación de Productores de Soja del Brasil (Aprosoja Brasil) propuso a la Cámara Paraguaya de Exportadores de Cereales y Oleaginosas (Capeco) de Paraguay establecer un joint venture (acuerdo comercial) para crear un nuevo canal para las exportaciones de granos, diferente a las establecidas por las firmas multinacionales, según informó ayer Sonia Tomassone, en el marco de la XVI Reunión de productores mundiales de cereales y oleaginosas (International Oilseed Producers Dialogue–IOPD), que cerró ayer en nuestra capital.
“Las autoridades de Aprosoja se mostraron muy interesadas en el trabajo que inició la Capeco, de crear un pool de empresas y de cooperativas, para que puedan ser una alternativa a las multinacionales”, dijo Tomassone. Explicó que la propuesta de la Aprosoja Brasil, que es un gremio bastante mayor que Capeco, es para tratar muchos temas, pero sobre todo buscar alternativas logísticas para juntar mercaderías brasileras y paraguayas, provenientes de los productores independientes o de las cooperativas, y de esa manera hacer volumen para exportar juntos al mundo.
Dijo que dicha iniciativa se está conversando en el marco de la reunión de productores mundiales de cereales y oleaginosas que concluye hoy en nuestro país, con la visita de campo en la zona sur del territorio.
Según los datos, el oligopolio de las cinco firmas señaladas maneja el 80% del volumen de soja que se exporta, a su vez, el 50% de ese oligopolio es manejado por las empresas ADM y Cargill, y completado el resto por Bunge, Dreyfus y Noble.
Las proporciones señaladas fueron calculadas en relación con el ejercicio anterior, periodo en que se cosechó en Paraguay más de 4 millones de toneladas de granos, y se exportó cerca de 3 millones de toneladas de la oleaginosa. En la presente campaña la cosecha se estimó en más de 8 millones de toneladas y se proyecta una exportación en cerca del 50%.
Hacer bloque contra UE
En otro orden, el director Ejecutivo de Aprosoja Brasil, Marcelo Duarte Monteiro, informó que también están analizando establecer un bloque regional más sólido, para hacer frente a las crecientes exigencias de la Unión Europea, que amenazan con frenar cada vez más las exportaciones de cereales y oleaginosas desde la región.