Cargando...
De 2003 a 2013 Paraguay muestra una movilidad ascendente de 47 puntos porcentuales y una movilidad descendente de 7 puntos porcentuales, dijo el coordinador del informe, George Gray Molina, economista en jefe del PNUD para la región de América Latina y el Caribe. Dicho de otra forma, mientras 47 de cada 100 personas ascienden a la clase media, 7 de cada 100 vuelven a un estadio inferior. El promedio latinoamericano es de 49% con movilidad ascendente y 11% con movilidad descendente.
Se acabaron los “logros fáciles” en lo social, laboral y genero en América Latina, y los futuros avances se encuentran ante rendimientos decrecientes de “más de lo mismo”, que obligan a enfocarse en mejores políticas, mejor fiscalidad, mejores instituciones y mayor impacto, argumentó.
El crecimiento económico, por más dinámico que sea, no resolverá los problemas estructurales de la región. Las acciones de política pública deben ir orientadas a romper obstáculos históricos para el desarrollo sostenible. Un enfoque multidimensional ayuda a identificar y actuar sobre estos problemas estructurales, agregó Molina.
Cada país transita por un proceso distinto de transformaciones sociales, económicas y ambientales. La agenda de desarrollo no expira en un umbral de ingreso ya que es más importante enfocarse en el bienestar más allá del ingreso. Quizá la tensión central de la actual generación sea proteger los logros alcanzados a través de la consecución de pisos de ingresos y de activos y del establecimiento de sistemas de cuidados y de protección social, concluyó.
Situación en América Latina
Las políticas públicas en América Latina tienen que girar en torno a la franja de población vulnerable, unos 224 millones de personas, para evitar que 30 millones de ellas recaigan en la pobreza, dijo también George Gray, quien explicó que entre 2003 y 2013, 72 millones de personas salieron de la pobreza en América Latina y otros 94 millones ingresaron a la clase media.
Según el informe presentado ayer en el Banco Central del Paraguay (BCP), el nuevo patrón de desarrollo ha de basarse en la mejoría del mercado laboral como elemento más importante.