Cadam: gran expectativa de venta

El presidente de la Cámara de Distribuidores de Automotores y Maquinarias (Cadam), Juan Pecci, evaluó positivamente la “Cadam Motor Show 2014”, que finalizó el fin de semana último en el Centro de Convenciones Mariscal López. Si bien la participación y ventas fueron menores a las del año pasado, el sector espera que, tras la recuperación económica en los próximos meses, se concreten los negocios a partir de los contactos hechos en la feria.

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De hecho, la decisión de comprar un auto 0 km no es instantánea, añadió, sino que es bastante analizada. Los clientes potenciales ven el producto, buscan promociones, comparan precios antes de elegir.

Según lo explicado, es por eso que, durante las dos semanas siguientes al emprendimiento, existe la posibilidad latente de que las firmas concreten numerosas transacciones e, incluso, los contactos dan frutos hasta un año después.

Tras la edición 2014 de Cadam Motor Show, hay muchas expectativas de venta para los próximos meses, luego de que a nivel local se supere el menor movimiento económico en todos los sectores del comercio.

Pecci agregó que, por ejemplo, tras la reactivación de las obras públicas es probable que haya mayor circulante, pero como el flujo de dinero no permea instantáneamente en todos los estratos, recién el próximo año se verán las mejoras.

Actualmente, el crecimiento económico previsto no se ve reflejado en el consumo y, de hecho, el sector automotor no es la excepción. Aun así, se espera un mejor escenario en el corto plazo, teniendo en cuenta la recuperación económica y las fortalezas del rubro.

Según resaltó el titular de Cadam, entre estas fortalezas se puede citar la formalidad y legalidad en las que trabajan las firmas, ya que pagan los impuestos, realizan inversiones y generan fuente de empleo.

Además, el consumidor tiene la certeza de encontrar repuestos, si los necesita, tiene un período de garantía y, además, los vehículos están preparados y adaptados a nuestras condiciones de tránsito (callles feas, calor excesivo, etc.).

Entre las dificultades mencionó que no hay ningún tipo de control en la importación de usados, “es la ley de la selva absoluta”. En teoría la ley limita el ingreso de vehículos hasta de 10 años de antigüedad, pero medidas judiciales pueden circular por muchos años más.

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