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Uno de los aviones es un Boeing 747-800 de Lufthansa que partió de Fráncfort con destino a Ezeiza, Buenos Aires, pero a primeras horas de este sábado debió aterrizar en nuestro país, con 345 pasajeros para aguardar que mejoren las condiciones climáticas en la capital argentina para retomar el vuelo. Finalmente, despegó de nuevo a las 09:00, tras reabastecerse de combustible.
También le ocurrió lo mismo a una avión de Avianca (Airbus A321), que despegó desde Lima, Perú, y se dirigía a Montevideo, con 146 pasajeros. Descendió en el Silvio Pettirossi a las 05:50 de ayer según los datos recogidos.
En este caso, por vencimiento de las horas de vuelo de la tripulación, no pudieron retomar el viaje inmediatamente, de acuerdo a lo establecido en las reglas establecidas por la aerolínea.
Los pasajeros fueron trasladados a un hotel donde debían descansar hasta las 18:00. El vuelo estaba previsto para la medianoche del sábado, según informó el administrador de la terminal aeroportuaria, Rubén Aguilar.