Argentina devolvió 22.583 MWh con energía de la EBY al Brasil en marzo

En marzo último, el Sistema Argentino de Interconexión (SADI) realizó operaciones de exportación de la energía de Yacyretá desde la Estación Santa María, provincia de Corrientes, a la Estación Garabí, en la frontera argentino-brasileña, por un total de 22.583 MWh, en carácter de “devolución”.

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De acuerdo con los reportes del Centro de Control y Operaciones de la central hidroeléctrica Yacyretá, así como de la Compañía Administradora del Mercado Mayorista (Cammesa) de Argentina y del Operador Nacional del Sistema Eléctrico brasileño (ONS), aún queda un remanente a favor de Brasil de energía emergencial de 9.581,85 GWh; razón por la cual desde el SADI seguirán con este tipo de operaciones, pese a que no respetan lo establecido en el Tratado de Yacyretá.

La primera operación se había realizado el lunes 13 de marzo, desde las 9:00 hasta las 17:12, con un paquete de 4.500 MWh; el martes 14, la transferencia fue de 8:00 a 17:12, con un envío estimado de 4.300 MWh; el miércoles 15 la exportación de energía a través de la interconexión Rincón-Garabí fue de 9:00 a 17:15, con un total de 4.600 MWh; el jueves 16 se realizó la operación de 9:00 a 17:15 con un total estimado de 4.183 MWh, mientras que el viernes 17; de 8:00 a 17:15, se exportó un total de 5.000 MWh. Esta última operación incluso no estaba programada, según el reporte de la EBY.

Al respecto, el ingeniero Axel Benítez, técnico del sector eléctrico, cuestionó la falta de una visión estratégica de nuestras autoridades, teniendo en cuenta que la central hidroeléctrica de Yacyretá no solo debe generar para satisfacer la crisis energética de la Argentina sino porque además debe devolver con esa energía al Brasil, haciendo operar al limite a la central buscando maximizar la generación. “No es casualidad que la ANDE haya retirado un 15% menos de energía de la EBY este primer trimestre de 2017 respecto al año anterior y un 10% mas de Itaipú, respecto al 2016”, indicó.

Justifican la ilegalidad El pasado mes de febrero, cuando había sido consultado al respecto, el director paraguayo de Yacyretá, Ing. Ángel María Recalde, reconoció que la transferencia de energía de la central hidroeléctrica que realiza la Argentina al Brasil, a través de la interconexión Santa María-Garabí, no está prevista en el Tratado. Sin embargo, pese a la ilegalidad, el funcionario justificó la operación argumentando que no se trata de una transacción comercial, sino de una “ayuda mutua” entre ambos países.

Especialistas del sector eléctrico, en reiteradas ocasiones denunciaron que dicha operación es considerada ilegal, puesto que el artículo XIV del Tratado de EBY establece que la adquisición de la energía solo “será realizada por A. y E. (Ebisa) y por ANDE”.

Por otro lado, en su artículo XIII el Tratado de Yacyretá establece que la energía producida por el aprovechamiento hidroeléctrico será dividida en partes iguales entre los dos países y reconoce a cada uno el “derecho preferente” de adquisición de la energía que no sea utilizada por el otro.

“Hay un silencio cómplice”

Para el Ing. Germán Escauriza, hay complicidad de las autoridades del Estado, anteriores y actuales, para permitir estas operaciones que constituyen un despojo de la energía que pertenece a todos los paraguayos. “Este escándalo sin precedentes cuenta con el consentimiento de la Cancillería paraguaya y del Presidente de la República. El hecho de permitir que empresas distribuidoras de la energía de Yacyretá retiren y no paguen la tarifa que establece el Anexo C constituye un acto lesivo para Yacyretá y para los altos intereses del Estado paraguayo”, señaló el especialista. Agregó que “es lamentable que el Gobierno paraguayo se comporte como si fuera autista, ante tamaño despojo”.

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