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La ley rechazada modifica parcialmente la Nº 4427/12, su artículo 2º, incluyendo “artefactos de refrigeración de uso doméstico y los destinados a la cocción de alimentos con alimentación eléctrica”.
González Oddone añadió que la Ley 4863, que saliera del Congreso en tiempo récord (menos de 60 días) busca extender los incentivos fiscales previstos en la Ley 4427/12 para la producción de bienes de alta tecnología a ensambladores de cocinas a inducción, acondicionadores de aire, heladeras y otros productos de refrigeración de uso doméstico.
Explicó que estos incentivos son: exoneración total del arancel aduanero para las partes y piezas que se importaren para realizar el ensamblado, disminución de la base imponible para la determinación del IVA al 1,5% en toda la cadena de comercialización, disminución de la base imponible para la determinación del impuesto selectivo al consumo en aquellos productos afectados por el impuesto.
Además, agregó, tendrían una preferencia de hasta 40% en precios frente a productos importados cuando ofertasen estos al Estado paraguayo.
“Pero estas exoneraciones impositivas no son solo para los ensambladores, sino también para cualquier empresa que quisiera importar tales partes y piezas, para después revendérselas a los ensambladores. Esto implica una perforación de la legislación tributaria vigente, en beneficio de los ensambladores y de los importadores de dichas partes y piezas destinadas al ensamblaje”, dijo.
Agregó que dentro de los considerandos de la Ley 4.863, los legisladores argumentan que es necesario fomentar el ensamblaje de estos productos, porque estos utilizarán electricidad de fuentes renovables en lugar de combustibles fósiles importados, como es el caso del gas licuado de petróleo. González Oddone alertó que este argumento solo se aplicaría en el caso de las cocinas a inducción, si estas fueran a sustituir a otras cocinas que usan GLP. “Pero esto no se aplica a ninguno de los otros productos de refrigeración incorporados en la Ley 4863, ya que estos siempre han utilizado y seguirán utilizando la electricidad, sean ensamblados localmente o importados. Aquí pareciera que se incluyó a último momento el rubro “artefactos de refrigeración para uso doméstico” para atender solicitudes particulares. Entonces, nos preguntamos: ¿Dónde queda el interés nacional que debe regir la creación de una ley de carácter general?”, inquirió.
Añadió que, en contrapartida, y siempre según esa ley, los ensambladores debían asegurar una incorporación de componentes locales de, por lo menos, 20% en todos estos productos. “A simple vista, una cocina a inducción tiene componentes muy sofisticados, que nunca se podrán fabricar en Paraguay, tales como placa vitrocerámica, un micro ventilador de gran rendimiento y otros componentes electrónicos como circuitos integrados, etc., todos ellos de alta complejidad y sofisticación. “Algo similar ocurrirá con los acondicionadores de aire y heladeras”, concluyó.