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En el primer punto menciona específicamente un depósito a plazo fijo en el Citibank de G. 5.000 millones, que no cuenta con número de cuenta bancaria y lo más grave “la falta de identificación de los intereses generados por el millonario depósito conforme a lo establecido en la solicitud de apertura de cuenta”.
En el punto dos apunta “la diferencia de un monto de G. 313.945.400 entre el saldo anterior y la cuenta de cheques devueltos”.
En el siguiente (3), los auditores aluden a créditos por provisión de combustible en el ejercicio 2016 por valor de G. 6.342 millones y G. 6.625 millones en el ejercicio 2017 (punto 4) y la falta de cobró intereses por valor de G. 1.664 millones por ventas de combustible a crédito.
Estas fueron las primeras cinco irregularidades detalladas por los auditores de la CGR en el informe de casi 200 páginas.
Otras anomalías mencionadas en el documento guardan relación con el “cupo libre” de combustible que tienen los funcionarios, en este caso por G. 1.277 millones, equivalentes a 294.149 litros (punto 6). Añade que esta práctica colisiona con la política de racionalización de la Ley 5.554/17 del presupuesto general de gastos de la Nación. También los funcionarios cuyos cargos no se encuentran estipulados en la resolución PR/RC 294/2015 tuvieron “cupo libre” por G. 79 millones, añade el documento (punto 7).
Los funcionarios también consiguieron comprar combustible a precio diferencial por unos G. 3.488 millones, equivalentes a 810.837 litros, en detrimento de los artículos 46 y 47 de la Constitución Nacional, refiere la Contraloría (punto 8).
En los siguientes puntos los auditores mencionan “pasivo corriente de proveedores locales” por G. 10.825 millones y acreedores varios por G. 42.572 millones.
Los auditores concluyeron que “el estado financiero de Petropar se presenta razonable a excepción de los mencionados en los puntos 1 al 12”.