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Humberto Colmán, director de Política Macrofiscal de Hacienda, detalló que las partidas que deben ajustarse del salario público, estimado en G. 400.000 millones (US$ 74 millones al cambio vigente), ya estaban previstas en el presupuesto 2017 y dado que el mismo fue vetado, se hará una reprogramación a fin de que los saldos cuadren a los límites establecidos en el LRF (1,5%) del PIB.
“Esta reprogramación incluye el ajuste al sueldo mínimo al 7,7% (G. 1.964.507) de los funcionarios que ganan por debajo de lo que dice la ley, las fuerzas públicas que tienen atada su escala al mínimo y los docentes que acordaron un incremento de 10% en el transcurso del año”, detalló el técnico.
Indicó también que las cifras estimadas para las remuneraciones van a estar por debajo del crecimiento de los ingresos tributarios, por lo que asegura que la relación ingresos tributarios contra gastos de salarios seguirá cayendo con relación al año pasado. A febrero último, esta relación está en 80%, es decir que el pago de salarios en la administración pública absorbía el 80% de los ingresos tributarios.
El Ministerio de Hacienda pondrá esta semana a consideración del Congreso un paquete de reprogramación presupuestaria, a fin de incluir dichos aumentos.
Dicha reprogramación implicará en primer término sacar el crédito disponible de un sector y trasladar a otro sin que esto represente un incremento del gasto público; en tanto, el segundo requiere de una mayor recaudación. Con esta operación también se busca evitar que el déficit sea mayor.