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El titular del gremio empresarial sostiene que el adelanto de corto plazo se viene utilizando desde hace tiempo y se debe más bien a los picos de necesidades que tiene la economía y los planes del Gobierno, una estrategia para pasar el año de una manera razonablemente equilibrada en los flujos intermensuales. “Diría que en sí no es un problema”, indicó.
A su criterio lo que se debe revisar muy bien es el nivel de endeudamiento y los motivos del endeudamiento, porque desde el sector privado se viene mirando con atención que no se traduzca en financiar gastos corrientes en medio de una campaña electoral. “Ese es el riesgo, más que los adelantos de corto plazo”, apuntó.
Macchi coincide en que destinar mayores recursos para la ejecución de los gastos en el primer semestre del año, en plena etapa electoral, genera suspicacias, como la misma declaración de emergencia en ciertos departamentos (Canindeyú, San Pedro y Concepción).
Considera, sin embargo, que como el Gobierno se demoró en poner en marcha gran parte de sus planes y todo está lento, este sería el motivo para recurrir a un adelanto de corto plazo ya en los primeros meses del año. “Es el propio Gobierno el que debe revertir la sensación de que todo está lento, si bien hay recursos, nos hemos endeudados, hay proyectos, la construcción es muy lenta, creo que ese es el motivo por el cual se tenga que recurrir al adelanto de corto plazo ya en los primeros meses del año”, añadió.
El presidente de la CNCSP sostiene que el nivel de endeudamiento del país está bajo y no hay riesgo mayor, pero si no se traducen en inversiones, no moviliza la economía, que signifique mayor recaudación y genere mayor competitividad para el país, el riesgo es que vaya a cubrir gastos corrientes en un año electoral y “ahí se estaría entrando en una práctica peligrosa”.
El Ejecutivo autorizó la semana pasada a Hacienda a iniciar las gestiones para obtener un adelanto de corto plazo del Banco Central del Paraguay (BCP), pero según explicó el ministro Santiago Peña, es solo a los efectos de tener disponible una herramienta para utilizar en caso de necesidad.
El adelanto, según el decreto, es para cumplir con el cronograma de compromisos de la deuda flotante (deuda pendiente al cierre de 2014) y los gastos prioritarios.
La ley permite a la cartera fiscal obtener hasta el 10% de los ingresos tributarios presupuestados, unos 1,9 billones de guaraníes (US$ 400 millones), fondos que en caso de ser utilizados deben devolverse en un plazo no mayor al 31 de diciembre.
Sobre este punto, el ministro Peña dijo que no se solicitó aún y que eventualmente, de utilizarse, se devolverá al siguiente mes con los fondos provenientes de los impuestos.
US$ 530 millones
Este año, el Ministerio de Hacienda destinará más de US$ 530 millones para pagar la deuda pública de la administración central. De este monto, para cubrir la deuda interna se prevé más de US$ 217 millones y para la externa más de US$ 313 millones, dentro de la cual se encuentran los intereses por bonos soberanos emitidos en 2013 y 2014.