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Francisco Daniel Medina Giménez es otro jefe de Aduanas que no conoce frustraciones económicas y con su sueldo de G. 4,3 millones en el 2011 iba consolidando un holding de G. 2.000 millones en la ciudad de Pirayú, donde también inauguró un balneario de 6 hectáreas ese año, y hoy es dueño de uno de los restaurantes temáticos más emblemáticos del país.
Su holding empresarial se denomina Fat Representaciones, se inscribió en el 2013 e incluye una gigantesca casa de electrodomésticos, de prendas y el ya reconocido Restaurante Eduvigis, símbolo del turismo local. Según confirmó el aduanero, anualmente tiene un movimiento comercial de unos G. 4.000 millones.
El funcionario es otro miembro de la claque de Nelson Valiente que pasó al frente con el gobierno del Nuevo Rumbo, donde empezó a disparar el moderado sueldo que venía percibiendo a G. 12,5 millones. Esta semana el director le ascendió como administrador de Zona Franca Trans Trade en Ciudad del Este.
Como explicaron otros compañeros suyos, Francisco alegó que su capital comercial “fue evolucionando de a poco”. Hace 7 años que su emprendedora esposa, Diana Raquel Benítez, quien por cierto también es de condición humilde y sin experiencia laboral formal, se encargó de la casa de electrodomésticos y desde allí el crecimiento económico de la familia no paró.
El funcionario no supo explicar el origen del capital de su exitoso negocio y se escudó en créditos bancarios. Cabe mencionar que Francisco ostenta una cotizada residencia, que según confirmó el aduanero ya terminó hace como 15 años, sin embargo hasta 5 años atrás ganaba solo G. 4,3 millones. Su emprendedora esposa Diana acaba de estrenar otra camioneta 0 km de unos US$ 45.000. Francisco también convirtió en empresario a su hermano Javier Medina, quien teóricamente pasó a ser accionista de Fat, al dejar de ser empleado de una casa de electrodomésticos.
El jefe aduanero dijo que su padre, don Vicente Medina, un humilde albañil de Pirayú, compró hace unos 15 años la propiedad donde se inauguró el paradisiaco balneario valuada hoy en unos G. 800 millones, sin considerar construcciones. La madre de Francisco, Antonia Giménez, una conocida chipera de Pirayú, aparece como dueña del balneario que, según lugareños cuenta con importantes edificaciones y hasta una cueva que conecta a una cascada.
Según los registros, Francisco en los últimos 6 años percibió G. 1.000 millones en sueldos, sin embargo, él ya había acumulado G. 2.000 millones en su negocio constituido formalmente en 2013. Ya vivía en una lujosa residencia valuada hoy en más de US$ 250.000 y se venía manejando en lujosos vehículos, etc.
rossana.escobar@abc.com.py