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Se trata de la nueva Ley de Responsabilidad Fiscal de segunda generación, que según Giménez va a permitir que el gasto de Paraguay sea menos volátil.
“Estas decisiones no se toman a la ligera, dependen de análisis profundos que los venimos haciendo ya desde hace un tiempo, de la mano del profesor Felipe Larraín”, indicó la viceministra. La propuesta también fue compartida a los técnicos del Fondo Monetario Internacional. Indicó además que en el gasto de Paraguay todo ese déficit está explicado en la actualidad con inversión en infraestructura, que va a tener un retorno social importante. Ya en el 2015 el Gobierno abrió la posibilidad de solicitar al Congreso suspender el artículo de la ley de Responsabilidad Fiscal que establece el tope de déficit de 1,5% del PIB, para ampliarlo a un máximo de 3% con el argumento de una mayor inversión pública. Sin embargo, no se concretó debido a la fuerte oposición de los diversos sectores.
El ejercicio pasado cerró con un déficit de 1,5% del PIB, que representa unos US$ 411 millones; de aumentarse el tope a 2,5%, el monto llegaría a unos US$ 685 millones (diferencia que se financia con deuda).