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El ministro de Hacienda, Benigno López, fue abucheado anoche por los sindicatos de trabajadores luego de presentar el proyecto de ley que crea la Superintendencia de Jubilaciones y Pensiones, durante una reunión convocada por la Unión Industrial Paraguaya (UIP) para conocer detalles del plan.
El encuentro fue suspendido por el presidente de la UIP, Gustavo Volpe, debido a que los sindicalistas lanzaron todo tipo de improperios contra dicho ministro e impidieron que el debate continúe normalmente, incluso le arrojaron huevos en el momento de retirarse del salón auditorio.
López estuvo acompañado por el presidente del Banco Central del Paraguay (BCP), José Cantero, y por el viceministro de Economía, Humberto Colmán, con quien realizó la presentación del referido proyecto que será puesto a consideración del Congreso después de Semana Santa, tras socializar con los diversos sectores y recibir las sugerencias.
Tanto el ministro como el viceministro aseguraron que el plan es a los efectos de supervisar y fiscalizar el sistema de pensiones para darle más transparencia y seguridad al manejo de recursos, y que de ninguna manera implicaría confiscación de fondos ni cambiar los cálculos paramétricos ni fundamentos de la jubilación de cada caja, porque se sigue manteniendo las ocho existentes con sus mismas reglas.
Los sindicalistas, sin embargo, reaccionaron señalando que rechazan totalmente el proyecto porque es peor que el anterior que fue rechazado por el Parlamento en 2018. Dijeron que con el plan se apunta a confiscar los recursos de los trabajadores, por lo que ya anuncian eventuales movilizaciones.
José Pineda, de Sitrande, expresó que se busca claramente utilizar los fondos, y Jorge Alvarenga, de la CUT, calificó al ministro de enemigo de la clase trabajadora y señaló su desconfianza porque se había hablado de consensuar el proyecto pero López optó por presentar de nuevo en forma unilateral.
El presidente de la UIP, por su parte, tras finalizar la reunión manifestó a la prensa que analizarán el tema para sentar postura, pero que en principio ya tienen algunos reclamos sobre el sistema de conformación del consejo, en donde no tienen participación tal como sucedió en el primer proyecto. En ese contexto, indicó que si no hay acuerdos difícilmente será aceptado el nuevo proyecto de ley, principalmente por los dueños de los fondos que son los trabajadores.
Con respecto al incidente, indicó que como con cualquier tema de interés nacional, la UIP quiso escuchar a los expositores proponentes pero que lastimosamente no se pudo concluir por el tumulto. “Nosotros habíamos extendido la invitación a representantes de centrales sindicales y esperábamos que se desarrollara con absoluta normalidad porque tenemos tanto interés como ellos en conocer en profundidad el proyecto, pero no fue posible por lo que hubo que anticipar su término”, dijo.