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“Hemos vivido en carne propia y hemos visto sinceramente un crimen al medioambiente”, dijo el senador Blas Lanzoni, presidente de la Comisión Nacional de Defensa de los Recursos Naturales (Conaderna), del Congreso Nacional.
Lanzoni junto a su colega Juan Afara participaron de un sobrevuelo y luego de un recorrido por tierra de la Reserva Natural Morombí, área protegida bajo dominio privado (del Grupo Riquelme) de 25.000 hectáreas de bosques nativos y 6.000 hectáreas de humedales que forman uno de los corredores biológicos más diversos del mundo.
Lanzoni agregó que existen una gran irresponsabilidad y hasta si se quiere complicidad de las instituciones del Estado, de la Policía y la Fiscalía que no han actuado en tiempo y forma y hoy ya se tienen grandes áreas deforestadas y con campamentos de plantaciones de marihuana. “Hemos visto gente realizando quemazones en los bosques y puentes (ilegales) que se están construyendo, que deben ser dinamitados inmediatamente, de lo contrario el daño ocasionado a esta reserva va a ser irreversible”, señaló Lanzoni, quien se comprometió a exigir acciones concretas a las instituciones encargadas.
Causa nacional
Por su parte, el senador Juan Afara señaló que por su importancia estratégica como parte del Bosque Atlántico del Alto Paraná y como zona de influencia del Acuífero Guaraní, la recuperación total de la Reserva Morombí debe ser una “causa nacional”.
“Esto requiere el interés del Congreso, del Presidente -de la República- y de todas las instituciones para que se hagan cumplir las leyes a fin de proteger algo tan valioso para todos”, alegó Afara.
Rosca criminal
A su turno, el comisario Osvaldo Ávalos, jefe de la Unidad Antinarcóticos de la Policía Nacional, realizó una presentación del trabajo que durante cuatro días efectuaron dentro de la reserva para identificar, ubicar y destruir plantaciones de marihuana.
El jefe antinarcótico afirmó que dentro del área protegida opera una rosca criminal en donde por un lado están los que deforestan y queman los bosques, los que se encargan del rollotráfico y la venta de madera y carbón, y los que seguidamente se dedican a plantar la marihuana.