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“Desde que era niño sueño con esto”, bramó ayer el capitán Philipp Lahm al ofrecer la Copa del Mundo a una multitud que se reunió en Berlín para celebrar la consagración de Alemania como tetracampeón mundial en Brasil. “Gracias por el apoyo”, exclamó Lahm desde los micrófonos y de cara al medio millón de fanáticos que deliraban frente a la puerta de Brandeburgo.
La celebración alemana incluyó también una inesperada burla para con Argentina por parte del autor del gol de la final, Mario Goetze, acompañado de Kroos, Andre Schuerrle, Klose, Roman Weidenfeller y Shkodran Mustafi. “Los gauchos caminan así, los gauchos quedaron así”, cantaban estos jugadores, mientras avanzaban encorvados y con un paso lento, para luego erguirse y exclamar “Así caminan los alemanes, así ganan los alemanes”.
También fue una burla la fila integrada por Schweinsteiger, Neuer y Howedes, quienes caminaron sobre el escenario uno detrás del otro apoyando un brazo en su compañero simulando a los jugadores de Brasil. Alemania arribó a la final tras humillar 7-1 a Brasil. “¿Dónde quedó el respeto?”, cuestionó un usuario de Twitter, mientras otros calificaron las burlas como “racistas, de borrachos y lamentables”.