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“Todo está bajo control. Marcharemos rumbo al título sin nuevos incidentes. Será un duelo tan limpio como apasionante”, prometió el ex tricampeón mundial de la Fórmula 1, el austríaco Niki Lauda, directivo de Mercedes. Las declaraciones de Lauda están en línea con el pedido público de disculpas del piloto alemán a su compañero de equipo británico por la maniobra que lo perjudicó en la segunda vuelta del GP de Bélgica, que luego Hamilton abandonó.
El líder del campeonato giró en 1’26”225 en su mejor vuelta y quedó a apenas 61 milésimas de segundo de Hamilton, del que pese a las disculpas parece separarlo un campo de distancia. El ex campeón mundial británico estuvo detenido en boxes durante más de una hora a la espera de que sus mecánicos resolviesen un problema electrónico en el motor de su bólido.