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Fueron los doctores del citado centro asistencial quienes decidieron sorprenderla. Hilando los contactos, consiguieron que el portero azulgrana y de la selección la visite.
“Jenni” se enteró minutos antes de la llegada del jugador. Virginia Aguilar (29), mamá de la niña, comentó que la pequeña arregló todos sus juguetes que estaban esparcidos en la cama y pidió vestir su remera de Cerro. Llegó Antony, en compañía de su esposa, a compartir la mañana con Jenni y regalarle una remera autografiada.
La niña no paró de conversar con el futbolista como si fuera ya mayor. Respondió a preguntas y lo comentó todo sin filtros.
Los doctores destacaron que la internación no es un límite para “esta campeona”, que aún desde la camilla de un hospital cumple sus sueños, a la par que llena de calor y color los fríos pasillos.