La artista estadounidense Jill Magid es la autora del macabro proyecto de trasmutación y las propias autoridades culturales del estado de Jalisco lo acogieron de inmediato, por tratarse de una idea “poética” . En tanto que el reconocido crítico y analista Jesús Silva Herzog cuestionó la iniciativa en la cual “uno le da un cadáver a una empresa y esta lo regresa convertido en una alhaja”. Criticó además que los restos de un gran hombre como Barragán fueran convertidos en una “moneda de cambio”.