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“Con cada lluvia muchas personas arrojan su basura al raudal y esto tapona todos los desagües fluviales”, se quejó Rafael Scorza.
La problemática se debe a la inconsciencia de las personas que arrojan sus residuos a la calle para que se los lleve el raudal. “Ellos se deshacen de su basura, pero el problema solo va a otro sitio”, dijo el lector.
Obstáculo en la acera
La usurpación de aceras es una constante en las calles de Luque. Vendedores informales, conductores y motociclistas obligan a los transeúntes a bajar hasta el asfalto para poder circular. “Así cierran las veredas con las motocicletas y mi hija embarazada se expone al peligro caminando en medio de los vehículos. Aquí está de moda esto” dijo la lectora Leonarda González.
La foto en que se ve una moto obstruyendo la acera fue tomada en la calle Yrendagué casi Rosario.
Calle olvidada
La calle La Esperanza del barrio Cañadita de Ñemby no es reparada por las autoridades municipales, pese a los pedidos de los frentistas.
Los vecinos pidieron al intendente Lucas Lanzoni la reparación, pero el jefe comunal les pidió poner tractor y arena. “El jueves pasado fuimos los vecinos junto al intendente y nos dijo que tenemos que poner arena y tractor. Nosotros qué vamos a hacer, si somos pobres”, dijo Nilsa Fernández.