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Las reacciones fueron casi unánimemente de apoyo a la medida.
“Por fin una buena noticia”, manifestó por medio de Facebook Stella Maris Escurra. “Me parece justo que el que no quiera trabajar que se vaya a otro lado. Basta de utilizar el dinero que con tanto sacrificio aporta el pobre trabajador, quien cuando va a pedir atención médica no encuentra ni medicamentos”, agregó.
“Mientras hay jóvenes aplicadísimos con muchas ganas de llevar un plato de comida a sus casas, otros usufructúan lo que viene gratis sin delicadeza alguna y con el guiño cómplice de los mal llamados jefes”, dijo Rosa Mitjans.
“¡Más vale que sean desvinculados! Y que devuelvan todo lo que han estado cobrando sin hacer nada”, propuso Anggie Medina.
“Ojalá no los coloquen en otra institución pública, que se divulguen los nombres”, pidió por Ricardo Escurra.