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El filme, dirigido por el argentino Héctor Echavarría, contó con un 50% de mano de obra paraguaya y fue filmado entre Asunción y Los Ángeles.
Esta noche, a las 21:00, en los Cines Itaú del Sol, se llevará a cabo la avant-première del filme, que desde el viernes podrá verse en los cines de Asunción y del interior del país.
Contento por la expectativa que está generando la película en el público, Echavarría señaló que la gente se encontrará con un filme “que les va a tocar el corazón, que les va a hacer reír mucho y hacer pasar un grato momento, que tiene un mensaje positivo al final”.
Recordó que el filme solo fue presentado anteriormente en el American Film Market, celebrado en Estados Unidos, con una proyección exclusiva para los distribuidores, tras la cual se vendió a Alemania, España, Francia y Estados Unidos.
Echavarría recordó que decidió filmar la película en Paraguay ante las dificultades para hacerlo en Nicaragua, el sitio pensado originalmente, por cuestiones de seguridad. Cuando llegó a Asunción para promocionar el filme “Chavez, cage of glory”, encontró lugares que podían asemejarse al país centroamericano, así como escenarios similares a los de la ciudad de Los Ángeles.
“Tuve muchísima suerte. La verdad es que la película quedó espectacular y nunca sabés que fue filmado en dos países diferentes, en dos meses diferentes. La magia del cine, ¿no?”, expresó.
Destacó, además, el talento de los actores paraguayos, así como la capacidad de los técnicos locales, mencionando que un 50% de la mano de obra de la película es paraguaya.
En el reparto se pueden ver a Celso Franco, Lilian Ruiz, Héctor González (Cérika), Héctor Silva, Francisco Lefebvre, así como a jóvenes talentos que realizarán su primera aparición en la gran pantalla. Además de Trejo (“Machete”) y Warren (“El planeta de los simios”), actúan los españoles Carlotta Bosch y Christian Rodrigo, y el propio Echavarría.
La trama girará en torno a Juan de los Santos, un exagente antidrogas cuya esposa e hijos fueron brutalmente asesinados. Tras haber sobrevivido al ataque, y con una bala incrustada en la cabeza que le hace perder la memoria esporádicamente, Juan deberá infiltrarse al cartel que atacó a su familia para intentar desbaratar un plan que busca inundar a los Estados Unidos con una nueva y poderosa droga.