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José Miguel Echeverría dirigirá hoy a la agrupación luego de ganar el Concurso de Dirección Orquestal realizado por los 60 años de la OSCA. “Este concierto es parte del premio y estoy muy contento. Me presenté para ganar la experiencia, enriquecerme y crecer”, contó el director.
Echeverría espera hacer “lo mejor posible, para que todos salgan satisfechos: tanto los músicos como el público”, dijo. Esta noche harán el Concierto para piano en Si Bemol Nº 2, de Beethoven; la Sinfonía Nº 1 Op. 39, de Sibelius; y la obertura de la ópera “Il re pastore”, de Mozart.
La mencionada sinfonía de Sibelius será un estreno en Paraguay. Dicha obra “es todo un reto, un desafío, sobre todo teniendo en cuenta la magnitud de una sinfonía que dura poco más de cuarenta minutos. Es una sinfonía maravillosa desde todos los puntos de vista”, manifestó el director.
Por su parte, María Fernanda Zapata tendrá su debut con la OSCA como solista. Su relación con el citado concierto de Beethoven se remonta a cuando tenía 15 años, cuando sus maestras hicieron un ciclo con los cinco conciertos para piano de dicho compositor. A ella le tocó el “número 2”, pero luego de eso nunca más tocó dicha obra, y hoy la volverá a interpretar.
“Ahora es muy diferente, es rememorar todo lo que aprendí”, mencionó la pianista, que en su carrera se dedicó más a la música de cámara. “Con orquesta como tal no toqué mucho más, pero me encanta poder ver ahora el concierto con otra óptica”, añadió.
A pesar de ser un “Beethoven temprano” la obra ya denota su carácter, “su lirismo tan intenso”, mencionó, sin dejar de resaltar los retos que tiene ella como pianista. “Se necesita mucha claridad digital pero a la misma vez requiere un toque que tenga sustancia, peso, una coloratura más densa”.
Para Zapata este es un punto muy importante en su vida. “Esto me ha tocado fibras internas muy importantes, y voy a disfrutar la oportunidad que me puso la vida”, concluyó.