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Esta colección es compartida junto con la editorial El Lector.
Publicada originalmente en el año 1964, en Buenos Aires, en “La llaga”, Casaccia utiliza el marco de una anécdota para realizar una disección de la sociedad paraguaya de ese entonces, dominada por la decadencia moral y por la dictadura del general Raimundo Alsina, quien llevaba diez años en el poder absoluto, los mismos que (¿coincidentemente?) llevaba entonces el general Alfredo Stroessner.
La obra que aparece hoy no se adentra específicamente en ese aspecto político, aunque lo desnuda en sus más crueles aristas, sino que gira en torno a los sentimientos, frustraciones, esperanzas, inseguridades e inconsecuencias de los personajes, oprimidos por circunstancias que no pueden vencer debido a sus propias debilidades humanas y al ambiente opresivo en que se desenvuelven.
En “La llaga”, Casaccia se nos presenta con todas las características que lo han marcado nítidamente como padre de la novelística moderna en nuestro país. Un lenguaje sencillo con el que logra la identificación plena de la gente; el desapego de los relieves estilísticos. Él no busca la forma por la forma, pero por eso mismo, dice al respecto el prologuista de esta edición, Juan Bautista Rivarola Matto, logra ser “asombrosamente eficaz y adecuado a su objeto”.
Gabriel Casaccia ha sido comprendido y valorado por críticos profundos y por grandes escritores. Pero también sus libros están al alcance del lector común, que más que comprenderlos, los siente y adivina.
La Colección Literatura Paraguaya incluyó esta obra de Gabriel Casaccia en la idea y el espíritu de que es una novela que todo paraguayo debiera conocer, por ser una radiografía exacta, como solo un gran escritor puede realizar, de una sociedad paraguaya que 52 años atrás, y con algunas pequeñas diferencias, tenía los mismos traumas que la de la actualidad.