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En una lancha que partió del puerto de Asunción, sus amigos y Tilly, hija de Lotte, se reunieron para cumplir uno de los deseos que la artista expresó en vida.
Al son de música paraguaya, de la mano de un dúo de músicos, y tras contemplar el horizonte, su hija esparcía las cenizas en el agua, junto con rosas rojas, y así despedían a la gran cultora del arte.
Víctor Jacinto Flecha, gran amigo de la artista, recordó a Schulz como una luchadora y expresó su felicidad por poder cumplir con su deseo. Además, compartió con todos los presentes un poema denominado “La memoria del agua”.
“Cumplimos con su voluntad, hemos tirado los pétalos de rosas con las cenizas. En el río quedó el rastro como un camino donde iba yendo ella”, dijo Flecha.
“Sigue viajando mi mamá, es lo que yo le deseo. Era una mujer extremadamente fuerte, determinada, una mujer que sabía lo que quería, no dudaba”, expresó Tilly, al tiempo de destacar que ella era muy paraguaya, y que su deseo de que sus cenizas sean depositadas en el río Paraguay era muy importante. “Ella me contó que cuando estaba embarazada de mí se bañaba en el Paraná. Como le gustaban tanto los viajes, para mí no había nada mejor que el río Paraguay, y va a ir al Paraná, es un viaje como la vida misma”, dijo.