“El gran Gatsby”, una de las mejores novelas del siglo XX

Una de las más exitosas series de libros que se hayan presentado en el marco de la alianza estratégica de ABC Color y la editorial El Lector culmina hoy con la publicación de “El gran Gatsby”, del escritor norteamericano Francis Scott Fitzgerald, considerada una de las mejores novelas del siglo XX.

/pf/resources/images/abc-placeholder.png?d=2059

Cargando...

Esta obra, escrita en París en 1925, en el marco de esa fulgurante época que siguió a la Primera Guerra Mundial y que culminaría con el crack financiero de 1929, es considerada la obra maestra de Scott Fitzgerald y constituye un fresco de época que, sin embargo, con la caracterización de los personajes y las situaciones, se proyecta a la universalización de su contenido por las tantas simbologías que se le han hallado y se le siguen hallando a través de los tiempos.

De acuerdo con el prólogo escrito por Bernardo Neri Farina, “conmovedora historia de perdedores, ‘El gran Gatsby’ proyecta un muestrario de la maestría de Francis Scott Fitzgerald para insertarnos en un universo acotado por paisajes simbólicos bellamente retratados y por diálogos cortos, certeros, cargados de intencionalidades que ahorran explicaciones sobre conductas y acontecimientos”.

“El gran Gatsby”, según el prologuista, no solo es la obra mejor de Fitzgerald, sino también “una obra maestra de la literatura universal, engendrada en el seno de aquella Generación Perdida que en París se bebió la vida y destiló talento”.

Francis Scott Fitzgerald, el gran narrador estadounidense, considerado el máximo intérprete literario de la llamada “era del jazz” de los años veinte de su país, nació en Saint Paul, Minnesota, el 24 de setiembre de 1896. Creció en una familia católica irlandesa. Estudió en la Universidad de Princentown, sin llegar a graduarse, y luego se alistó en el ejército para participar en la Primera Guerra Mundial.

Con su novela inicial, “A este lado del paraíso” (1920), obtuvo gran popularidad, lo que le permitió convertirse en una de las figuras más representativas del “sueño americano” de la década de 1920.

Se trasladó a Francia junto con su mujer, Zelda Sayre, personaje fundamental para Fitzgerald, ya que fue su inspiración y compañía en el decenio de gloria que les tocó vivir, y el centro de sus preocupaciones a partir de 1930, cuando él se hundió en el alcohol y ella en la demencia (murió en el incendio de la clínica donde estaba recluida, en 1948), y ambos debieron afrontar las consecuencias del fracaso y la miseria.

Scott Fitzgerald cultivó también la narración breve, y algunos de sus cuentos están considerados antológicos dentro de la literatura en lengua inglesa: ciertos relatos pueden ser clasificados en el género del horror, y en otros descarga su sarcástica eficacia contra la clase de los poderosos.

Escribió aún otras dos grandes novelas, “Suave es la noche” (1934), que él consideraba la culminación de su obra, y la póstuma e inconclusa “El último magnate” (1941), donde cuenta los aspectos más miserables del mundillo de Hollywood, que tan bien conocía, ya que en los años de ruina que precedieron a su muerte trabajó como guionista.

Francis Scott Fitzgerald falleció en Hollywood el 21 de diciembre de 1940. Tenía apenas 44 años de edad.

Enlance copiado
Content ...
Cargando...Cargando ...