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Conocimos al Depredador en la selva centroamericana, donde cazaba a un grupo comando norteamericano encabezado por Arnold Schwarzenegger. La película estaba dirigida por John McTiernan, el mismo de “Duro de matar” y tantas cintas de acción de los ochenta y noventa.
La nueva producción está dirigida por Shane Black, quien integraba el pelotón de la primera película. Hacía el papel humorístico en la película y era el primero en morir. Black ha hecho carrera como guionista y director. Ha dirigido “Iron Man III” y “Dos tipos peligrosos” y escribió varias cintas, entre ellas “Arma mortal” I y II.
La nueva película presenta a otro pelotón, integrado por soldados desclasados, con problemas mentales y que está dirigido por Quinn McQuenna (Body Holbrook, Murphy de “Narcos”). Su hijo, accidentalmente, habilita a los depredadores a que invadan la Tierra. El grupo que combatirá a los invasores (que están mucho más desarrollados que en las anteriores películas) se completa con una bióloga (Olivia Munn) que es la madre del chico y ex esposa de McQuenna.
El filme tiene mucho de comedia y poco de lógica. Pero eso no afecta a la trama, al contrario. Black entrega un filme que no se toma muy en serio y que deliberadamente asume sus influencias ochentosas. Un producto que cumple con el original.