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Juan Bautista Rivarola Paoli presenta en esta obra los principales aspectos de un hombre de leyes de la talla del doctor de Luis de Gásperi (1890-1975), quién fue el responsable de realizar la ciclópea tarea de preparar el primer Código Civil del Paraguay elaborado por un paraguayo.
El libro comienza con la vida de Luis de Gásperi, para luego presentar su actividad política como militante del Partido Liberal.
Durante su vida política, De Gásperi llegó a ocupar una banca en la Cámara de Diputados y posteriormente fue elegido senador de la Nación, asimismo ocupó la cartera del Interior durante el mandato del presidente José P. Guggiari.
Posteriormente el autor presenta los diversos aspectos vinculados a la labor principal del doctor De Gásperi en la vida jurídica; en ese sentido comenta las principales obras.
En el siguiente capítulo se ocupa de analizar su tarea como responsable de preparar el anteproyecto sobre el cual se aprobó finalmente el Código Civil Paraguayo.
En la parte final del libro, el autor presenta otra faceta de la personalidad de Luis de Gásperi, que es la literaria, destacando que llegó a ser presidente de la Academia Paraguaya de la Lengua Española y correspondiente de otras tantas de América Latina.
De acuerdo con Raúl Amaral, Luis de Gásperi protagonizó los comienzos de la primera etapa del modernismo (1900-1910) desde la dirección de la revista del Centro Estudiantil (1908), que fue uno de los bastiones de la nueva tendencia.
Allí publicó relatos costumbristas y semblanzas de escritores nativos, entre los que se destacan “Idilio guaraní” y los perfiles dedicados a Alejandro Guanes, Juansilvano Godoi y Manuel Domínguez, aparte de la sección “De las aulas”, donde intercambiaba “opiniones poéticas” con Eloy Fariña Núñez (1910).
Luis de Gásperi nació en Asunción en 1890. Sus padres fueron Dámaso de Gásperi y Juana Vera y Aragón. Bachiller por el Colegio Nacional, obtuvo su título de doctor en Derecho en 1917.
Su obra más importante, sin lugar a dudas, es el Código Civil. Según el doctor Raimundo Paniagua, son pocos y muy encumbrados los juristas que “se atrevieron a escalar esa empinada montaña que lleva a la gloria”.
Cita entre esas personalidades que hicieron semejante proeza a Andrés Bello, Dalmasio Vélez Sársfield, Augusto Teixeira de Freitas y Clovis Bevilaqua en el Brasil, Tristán Narvaja en Uruguay.