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La presentación será en el marco de los 60 años del Instituto Cultural Paraguayo Alemán (ICPA).
“Voy a comenzar en el Berlín de 1920 haciendo las canciones originales del cabaret. Voy a cantar también en yiddish y hebreo, mostrando algunas de las músicas que se cantaban en los guetos durante la Segunda Guerra Mundial”, comentó la artista, en una amena charla tras su llegada a nuestro país procedente de Nueva York.
El viaje, en el que estará acompañada por el pianista Richard Danley, pasará además por la chanson francesa y pondrá en escena a lo que sucedía en los Estados Unidos durante la década de 1930 con el jazz y algunas canciones de musicales de Broadway.
“Me sumerjo en diferentes estilos musicales, en distintos países e idiomas y en lo que ocurría en estos lugares”, anticipó Haan, señalando que entre las canciones también dialoga mucho con el público, contando sobre las obras o de ella misma con un toque de humor, bien al estilo original del cabaret.
Igualmente, anticipó que para esta noche prevé hablar un poco de español y sorprender al público con una canción en este idioma, sin adelantar mucho del repertorio.
Haan sostuvo que lo que más le apasiona de la música es su vínculo con la historia y entender en qué contexto se desarrollaron ciertas obras. Entre sus principales influencias mencionó a Jaques Brel, Edith Piaf, Patricia Kaas, Marlene Dietrich y Charles Aznavour.
Otro aspecto que le atrae de las canciones es la poesía, algo a lo que presta mucha atención a la hora de subir al escenario a interpretarlas. “Las letras tienen que ser poéticas, me gustan las canciones tengan un significado o un contenido con el que puedo actuar”, acotó.
Con respecto a sus inicios, Haan destacó que creció en una familia muy musical por lo que aprendió a tocar el piano y el contrabajo siendo una niña. Destacó el apoyo constante de sus padres para tomar clases de ballet, tocar en una orquesta juvenil, tomar lecciones de canto e ir luego a estudiar a Nueva York, donde egresó del American Academy of Dramatic Arts en 1999. También tomó clases en la prestigiosa escuela estadounidense Julliard.
A lo largo de su carrera musical, Adrienne ha compartido el escenario con la Orquesta Sinfónica de Jerusalem, la Filarmónica de Colonia, la Sinfónica de Frankfurt, entre otras.
Sin haber visto mucho de Paraguay tras su arribo al país, la cantante señaló haber disfrutado de un exquisito chupín de pescado.
Con respecto al público, aseguró que prefiere no hacerse expectativas y que en ello está lo atractivo de presentarse en distintos lugares del mundo. “Cada público, cada país es diferente. Algunas personas en Nueva York son muy distendidas, casuales, pero hay partes en Alemania donde el público es muy rígido. En Sudamérica encontré gente muy abierta. Cuando estuve en Chile me decían ‘acá es muy difícil, la gente es muy estricta’. Pero no fue así con mi show”, comentó.
Agregó que para ella lo importante es poder tocar el corazón o el alma de la gente y compartir con el público la alegría, el dolor y la risa.
Las entradas están a la venta en la Red UTS a G. 300.000 y 2 por G. 500.000. Además del show, el público podrá disfrutar de un open bar con espumantes, vino y agua.
Lo recaudado será a beneficio del ICPA, que desempeña un importante papel en la difusión de la cultura alemana.