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El déficit de precipitaciones se arrastra desde la quincena de diciembre pasado, cuando aún había grandes expectativas sobre los resultados de la campaña sojera 2024/25. En un contexto de ausencia prolongada de lluvias, que afectó a los cultivos en la etapa crítica de su desarrollo, aún resulta complejo analizar cuál es el nivel de afectación, según explicaron desde la Cámara Paraguaya de Exportadores y Comercializadores de Cereales y Oleaginosas (Capeco).
Hugo Pastore, director ejecutivo de Capeco, detalló en conversación con ABC que la situación general del cultivo de soja “está muy comprometida”, aunque subrayó que aún no se puede precisar con certeza el nivel de afectación.
“No solamente afecta el rendimiento de los cultivos, sino que probablemente en algunas regiones también va a impactar en la calidad del grano de soja. Hay certezas de que las expectativas que se tenían al inicio de la campaña en torno a la productividad ya no se van a alcanzar, pero aún no hay cálculos precisos”, indicó.
Añadió que si bien los cultivos de la zona sur del país se venía desarrollando a mejor ritmo, ahora también se ven comprometidos ante las condiciones climáticas adversas. Mencionó además que la realidad es aún más alarmante en la zona norte, siendo los más afectados San Pedro, Caaguazú y Canindeyú.
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Proyecciones climáticas
Pastore se refirió al escenario que deberá enfrentar la campaña agrícola en los próximos meses y enfatizó en que febrero también se presentaría con niveles de precipitaciones “ligeramente inferiores a lo normal”. Aunque, hizo hincapié en que si bien la llegada de las lluvias es importante, su distribución es aún más crucial.
“Hay que recordar que en secuencia, tras la cosecha, viene la zafriña de maíz y también de soja, que van a requerir condiciones para implantarse y desarrollarse”, señaló.
Dijo igualmente que si bien se da mayor atención al cultivo de soja por su extensión en el territorio nacional, el sésamo y otros rubros hortícolas también se ven muy afectados por el déficit de precipitaciones.
Respecto a la amenaza de la instalación de La Niña, señaló que los últimos reportes meteorológicos dan cuentas de que se mantiene en una fase “neutral”, pese a que a inicios de enero parecía que el fenómeno climático buscaba instalarse. “Hacia el fin de enero, esta tendencia comienza a revertirse y estamos de vuelta ante un escenario neutral”, detalló.
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Desarrollo de la cosecha
El director ejecutivo de Capeco adelantó que la cosecha de la actual campaña agrícola tomará aún más fuerza a finales de mes e inicio de febrero, por lo que aún se deben esperar algunas semanas para tener un panorama más preciso de los rendimientos y el nivel de afectación de la falta de lluvias.
“Cada día que no lleguen las lluvias, es un más de pérdidas para el sector. Se está muy expectante a la llegada de las precipitaciones para paliar los daños que se están registrando”, agregó.