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Tras el desplome de una parte del revestimiento de la pared de una de las torres de las oficinas del Gobierno, construidas por el Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC) en el Puerto de Asunción, la empresa contratista informó a este diario que asumirán la reparación de la estructura sin ningún costo para el Estado.
El Ing. Rubén Galeano, del Consorcio TBI, integrado por las empresas paraguayas Tecnoedil SA, Alberto Barrail e Hijos SA y la Constructora Itasa SA, informó que los trabajos comenzarán este lunes y culminarán el miércoles o jueves.
“Evidentemente, vamos a hacer la corrección respectiva del desprendimiento de esas chapas a partir del lunes, cuando pare la lluvia”, expresó.
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¿Por qué se derrumbó la estructura?
Cuando se le preguntó por qué se derrumbó la estructura a poco más de un año de la inauguración, mencionó que no es correcto considerarlo un “derrumbe”, sino que se trató de un “desprendimiento” de las chapas (AMC). Admitió, asimismo, que en la zona afectada ya había una desalineación o desaplomo de dos a tres centímetros de la pared, lo cual se corrigió con revoque, lo que pudo haber influido. Sin embargo, culpó principalmente al viento de la caída.
“Lo que probablemente haya pasado es que uno o dos de los miles de tarugos que se colocaron (para sostener el revestimiento) fallaron. Al fallar uno de los tarugos, el viento entra por allí y puede inflar, como lo hizo ahora. Es así que probablemente se desprendió, aproximadamente, 70 metros cuadrados. Nosotros colocamos alrededor de 20.000 metros cuadrados de revestimiento de chapa”, explicó.
Galeano señaló que ya se realizó la recepción definitiva de la obra, pero que las fallas que se detecten siguen siendo responsabilidad de la empresa. “Si se trata de defectos ocultos, nos toca reparar. Pero en este caso, por más que haya sido una cuestión de fuerza mayor, como la del viento, igualmente vamos a reponer eso. No es ningún inconveniente”, expresó.
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Contratista tiene responsabilidad civil de 10 años
Por su parte, el Ing. Hugo Rolón, del MOPC, señaló que la empresa tiene una responsabilidad civil de 10 años por la obra, a pesar de que ya tiene la recepción definitiva, y que reparará el revestimiento afectado por el “viento y por la lluvia”, acotó.
“El problema se dio en la sujeción con los tornillos y tarugos, por un tema del revoque o de la estructura, la mampostería. No es normal que ocurra, pero hay un bajo porcentaje de que ocurra, y por eso la empresa contratista va a asumir plenamente el volver a colocar esas placas. Se tiene en stock las placas, que están en depósito, para que no alteren la arquitectura”, explicó.
El Ing. Rolón señaló que hay una buena relación entre el MOPC y la contratista, y que desde la institución ya han clausurado el acceso vehicular en esa zona, el cual permanecerá cerrado hasta que se realicen las reparaciones.
Otras fallas se deben a la falta de mantenimiento
Los pocos funcionarios que ya trabajan en la torre que le corresponde al MOPC, ocupando solo tres pisos de los doce que tiene el edificio, señalaron problemas con las instalaciones, como el sistema de aire acondicionado cuyos ductos filtran agua, los ascensores que se detienen con personas dentro, y la falta de presión de agua en los sanitarios, que no pueden ser utilizados en ninguno de los pisos. Además, los estacionamientos en los subsuelos se están quedando a oscuras debido a que los fluorescentes se están quemando.
Sobre estos temas, tanto Galeano como Rolón indicaron que se deben a la falta de mantenimiento de los edificios, que ya deben estar a cargo de las instituciones que aún no ocupan cuatro de las cinco torres en su totalidad.
La obra costó millones al Estado paraguayo
Los trabajos están a cargo del Consorcio TBI, integrado por las empresas paraguayas Tecnoedil SA, Alberto Barrail e Hijos SA y la Constructora Itasa SA, representado por Carlos María Orué Gusmao, Rolando Ríos Tomboly y Alberto Barrail.
La obra fue adjudicada por G. 478.828 millones (US$ 68 millones), pero el monto del contrato ya se incrementó a G. 574.579 millones (casi US$ 82 millones), lo que representa un sobrecosto de G. 95.750 millones (US$ 13,6 millones), un aumento del 20%. Este encarecimiento se debió a la incorporación de la construcción de un eje cívico, que incluye un parque con estacionamiento subterráneo.