Como se trata de un nuevo sistema de tarifado de la ANDE, los clientes primero deben entender cómo funcionan las tarifas por tramos horarios. Para eso, el exjefe del Departamento de Facturación de la ANDE, Ing. Juan José Encina, recordó que con la tarifa actual, los clientes residenciales pagan un precio único, que varía según su consumo mensual total, desde 311,55 Gs/kWh para consumos menores a 50 kWh, hasta 435,51 Gs/kWh para consumos superiores a 1000 kWh.

En tanto que con el nuevo esquema, los precios se dividen en dos categorías:

• Horario de punta de carga (más caro): de 12:00 a 16:00 y de 18:00 a 22:00 de lunes a sábado, con tarifas que llegan hasta 669,17 Gs/kWh.
• Horario fuera de punta (más económico): el resto del tiempo, con tarifas desde 263,88 Gs/kWh, que representa 31% menos que la tarifa actual.

Lea más: ANDE lanza nueva tarifa por horario y plantea un cambio de hábitos en el consumo de energía eléctrica

Este nuevo esquema busca incentivar a los usuarios a desplazar su consumo hacia los horarios de menor demanda, pero esto exige cambios en los hábitos de uso, especialmente para reducir el consumo en horas de alta demanda.

Unite al canal de ABC en WhatsApp

¿Conviene para el consumidor?

Según el Ing. Encina, la conveniencia de esta tarifa depende de cómo se distribuya el consumo energético durante el mes. Puso como ejemplo el siguiente caso: para un hogar promedio, que consume 400 kWh, si el consumo en horario punta es el 29% del total, la factura podría ser un 5,5% menor que con la tarifa actual. Pero si el consumo en horario punta aumenta al 40%, el costo sería un 5,5% mayor. Asimismo, resalta que si se logra evitar completamente el consumo en horario punta, el ahorro podría alcanzar un 35%.

Sin embargo, advierte que eso requiere cambios significativos en los hábitos de consumo, como restringir el uso de aire acondicionado (AA) en las horas de mayor calor, que puede traducirse en pérdida de confort.

Lea más: Industrias y comercios denuncian graves pérdidas por cortes de luz y exigen respuestas a la ANDE

Impacto en el verano y preocupaciones

El Ing. Encina añade que aplicar esta modalidad en diciembre, justo cuando aumenta el consumo por el calor y por las festividades, puede ser contraproducente para los consumidores. Los horarios de punta coinciden con el mayor uso de AA y las luces navideñas, dificultando el cambio de hábitos en un corto plazo.

“Este mes se utilizan muchas luces de Navidad, que se prenden desde las 18 horas en adelante; esto obligaría a que la gente prenda sus luces de Navidad después de las 22 horas y que no use aire acondicionado a la siesta ni cuando vuelve de su trabajo”, detalla.

Además, sostiene que la implementación exitosa depende de varios factores. Entre ellos, la precisión de los medidores y en la facturación. Los medidores deben estar calibrados para registrar el consumo por horarios, y la facturación debe reflejar correctamente la tarifa aplicada.

Lea más: ANDE: Consejo de Empresas Públicas debe analizar nueva estructura tarifaria

También se resalta la toma de conciencia, que con una campaña informativa previa y un período de adaptación serán esenciales para que los consumidores comprendan y ajusten sus patrones de consumo.

Se suma a estos puntos, la planeación. El Ing. Encina sugiere que un lanzamiento en meses menos calurosos, como después del verano, hubiera sido más conveniente, y con un plan de implementación planificado y de mediano plazo.

Beneficios para la ANDE y desafíos para consumidores

Para la ANDE, este sistema permite reducir la demanda en horarios de alta carga, aliviando la presión sobre el sistema eléctrico y mejorando su eficiencia. Sin embargo, para los consumidores, el cambio dependerá de su capacidad para ajustar hábitos, por ejemplo: Limitar el uso de los acondicionadores de aire en horas de la siesta y en las tardes, encender luces decorativas después de las 22:00, realizar actividades intensivas en consumo, como planchar o lavar ropa, en horarios fuera de punta.

Lea más: Con préstamos y obras, la ANDE planea “mejorar” el servicio

La tarifa por tramos horarios ofrece un potencial de ahorro significativo, pero también implica desafíos considerables, particularmente en verano. Aunque es una opción voluntaria, su efectividad para los consumidores dependerá de un cambio de hábitos sostenido y de medidas de concienciación por parte de la ANDE.

El Ing. Encina concluye que sería mejor que la empresa estatal de electricidad haga campaña de concientización y que se aplique el nuevo sistema después del verano. “Aplicarlo en diciembre, cuando aumenta el consumo justo en el horario de punta de carga, sería contraproducente para el consumidor y quedaría como sobrefacturación”, advirtió.