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La “multisectorial” es una organización nacida hace algunos años para aglutinar a quienes trabajan en el programa del Fondo Nacional de Viviendas Sociales (Fonavis), del Ministerio de Urbanismo, Vivienda y Hábitat (MUVH), cuyo titular es Juan Carlos Baruja (ANR- HC). Allí están personas físicas y jurídicas que prestan a dicha cartera el “Servicio de Asistencia Técnica (SAT)” y también constructoras y, al parecer, beneficiarios del citado programa.
Pero tras diferencias entre sus miembros y como un desprendimiento de la “multisectorial”, se creó la Asociación Pro Vivienda (AsoPro), liderada por Carlos Fleitas. Este otro gremio también aglutina a los “SAT” del MUVH, aunque ninguna de las dos nucleaciones tiene un sistema de acceso público para conocer quiénes son realmente sus “representados”.
Todo indica que son dos grupos que hasta hoy tienen posturas distintas. Esta mañana, Fleitas criticó a la “multisectorial” por movilizar a indígenas en la protesta frente a la sede del ministerio, cuyo trasfondo es, a su criterio, el interés económico de sus “líderes sociales”. Las declaraciones las brindó a ABC este miércoles 11 de setiembre, a más de una semana del inicio de las manifestaciones en cuestión.
Líder denunciado por Baruja
Hace días que miembros de la multisectorial se encuentran frente a la sede del MUVH, durmiendo bajo carpas y hasta con amenaza de sus miembros de crucificarse, si no se atienden sus pedidos. El presidente de esta organización es Pulciano Sánchez, quien fue denunciado por el ministro Baruja por falsear documentos presentados en el marco del programa Fonavis, y quien en el marco de ese caso, obtuvo una salida procesal.
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Pero, ¿qué exige la multisectorial? Son tres puntos específicos relacionados a la vivienda:
- Que se les adjudique el 33% de los subsidios en cada llamado de presentación de proyectos del Fonavis.
- El cese de persecución (sin describir a qué se refiere con “persecución”).
- Y publicidad a las mencionadas convocatorias.
Así también, dos puntos sobre los cuales el MUVH no tiene poder de decisión:
- La suspensión sine die del estudio del proyecto que plantea la fusión entre el Indert y el Ministerio de Agricultura.
- Que no se derogue el artículo 104 del estatuto agrario que permite al Indert la recuperación de tierras fiscales, la cual no estará en la Ley de Registro Único Nacional (RUN). Otros cuestionamientos al RUN.
Al respecto, Fleitas lamentó que se movilicen a los indígenas para que participen en las protestas, con promesas que quizás no se cumplan y subrayando que “hay muchos intereses económicos de por medio”.
“Se juega con la necesidad de la gente”
“Muchos dirigentes sociales, y digo dirigentes sociales entre comillas, son juez y parte (en la administración de recursos públicos), pues tienen empresas constructoras que están lucrando. Se juega con la necesidad de la gente”, lamentó el presidente de la Asociación Pro Vivienda.
El Fonavis es un programa estatal de viviendas que otorga hasta un 95% de subsidios para la casa propia a gente de escasos recursos. El proceso de gestión y ejecución de proyectos habitacionales es el siguiente: Los organismos que prestan el servcio de asistencia técnica, que son llamados “SAT”, presentan al MUVH un plan de construcción de viviendas, luego de firmar previamente un contrato con la constructora o profesional de la construcción y de haber acordado dicho plan con pobladores organizados. En este programa, la cartera no otorga subsidio individual, sino que debe ser grupal.
Entonces, cuando Fleitas dice que los SAT son “juez y parte”, se refiere a que una misma organización se alza con todo el dinero del proyecto de construcción de viviendas, dando a entender que sólo en papeles hay una separación de funciones entre el SAT y la constructora.
Para dimensionar cuánto dinero lleva un SAT, Fleitas señaló que cada vivienda social tiene un costo de G. 100 millones, entonces en un proyecto de construcción de 50 casas, la adjudicación del MUVH sería de G. 5.000 millones, comentó.
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“Los proyectos que normalmente se adjudican son mínimo de 50 viviendas y no más 100, justamente atendiendo el limitado presupuesto. Se necesitan más recursos para disminuir el déficit habitacional”, dijo.
¿Qué solución propone ante la protesta?
El líder de la Asociación Pro Vivienda (AsoPro) sostiene que la solución al problema actual reflejado en la protesta frente al MUVH es la instalación de una mesa de diálogo, en busca de consenso. Plantea que se logre un acuerdo para la construcción de viviendas sociales, dinamizar la economía con esas obras y trabajar en un mejor presupuesto para el Fonavis.