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El Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC) informó que ya se tiene una crisis actualmente en el Río Paraná, debido a que las embarcaciones ya no pueden salir de los puertos por la bajante, principalmente aguas abajo de las represas Itaipú y Yacyretá.
Ante esta situación, la institución manifestó que realizará dragados urgentes en cuatro pasos difíciles que son: Carpichero (km 1.385), Cancha Dorada (km 1.389), Vizcaino (km 1.417) y Punto Mercedes (km 1.420).
El Ing. René Peralbo, director de vialidad de Obras Públicas, informó que estos trabajos se realizarán con la Comisión Mixta (Paraguay y Argentina) y que demandará una inversión de G. 2.000 millones.
El Río Paraná, más crítico
“En el río Paraná la situación es más crítica respecto al río Paraguay porque la profundidad ya no está dando para navegar y no tenemos un contrato vigente de dragado. Entonces, por una emergencia, vamos a contratar una empresa que va a intervenir en cuatro pasos”, mencionó.
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Asimismo, el funcionario señaló que el Paraná tiene en total 17 pasos que se deben intervenir con trabajos de dragado, pero que estas tareas ya se realizarán con otra contratación, por G. 100.000 millones, cuya licitación se publicará en un mes. Peralbo manifestó que con esta contratación se podrá mantener este tramo de la hidrovía por cinco años.
“Ahora lo urgente es intervenir en los cuatro pasos mencionados, donde ya hay barcazas detenidas en los puertos. Estas embarcaciones no pueden salir porque no tienen el calado que se requiere. Por eso vamos a hacer un contrato de emergencia con la Comisión Mixta (Paraguay y Argentina), por G. 2.000 millones, para que se intervengan estos cuatro pasos conflictivos que tenemos y que, de esta manera, las barcazas puedan salir de los puertos”, dijo.
Afecta a las exportaciones, afirma Cafym
El Centro de Armadores Fluviales y Marítimos del Paraguay (Cafym) informó que la crítica situación del río Paraná ya está afectando a las exportaciones. “Es una situación que está afectando directamente a la exportación a través de ese corredor”, expresó el presidente del gremio, Raúl Valdez.
Además, señaló que durante todo el año tuvieron demoras por la bajante del río Paraná, pero que pudieron aprovechar los momentos en los cuales habían ventanas de agua, cuando Itaipú y Yacyretá liberan caudales, situación que aprovechan para mover las embarcaciones.
“Hoy en día efectivamente hay embarcaciones que están siendo afectadas. Las condiciones y los pronósticos no son buenos, pero de cualquier manera se está trabajando también de una manera organizada para poder conseguir justamente los fondos necesarios para poder realizar las obras que hacen falta”, acotó.
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Asimismo, señaló que el sector privado viene financiando obras de gran magnitud en este trayecto del Paraná y que el MOPC también ahora empezará a apoyar con recursos “para poder de alguna manera mitigar los efectos e impactos que se está teniendo a raíz de la bajante”.
Al mismo tiempo, Valdéz enfatizó que en el tramo del río Paraná, compartido entre Argentina y Paraguay, especialmente aguas abajo de la represa de Yacyretá, se está sintiendo mucho los efectos de la escasez de agua.
“Recordemos de que ese tramo del río es una sección que está altamente regulada por las represas que deben mantener una cota mínima, en función a sus planes de producción energética. Ahí le tenemos a Yacyretá después a Itaipú y arriba de Itaipú hay una docena o más de represas brasileñas que están acumulando agua en sus embalses para poder producir energía eléctrica. Entonces depende muchísimo del caudal que se vaya liberando desde las represas y de las lluvias para cargar los afluentes”.
Actualmente se proyecta una crítica bajante en la hidrovía Paraguay-Paraná que empeorará desde octubre y seguirá hasta comienzos del 2025, por la escasez de lluvia en las cuencas de los dos grandes ríos.