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El economista jefe y futuro miembro del directorio del Banco Central del Paraguay (BCP) Miguel Mora explicó sobre las variables que incidieron en el resultado inflacionario del mes de junio que cerró con una variación del -0,4%, y 2,8% acumulado en el primer semestre, y del 4,3% en un año.
En relación a los cuestionamientos sobre estos resultados, el economista detalló que la inflación es un indicador general que mide un conjunto de elementos y que no va reflejar necesariamente la situación particular de un hogar o de una persona, ya que es una inflación macro. El Índice de Precios del Consumidor (IPC) se compone de 465 productos de aproximadamente 12 rubros que tienen sus ponderaciones en este cálculo, por eso el resultado general parece estar lejos de lo que el consumidor percibe.
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No obstante, la inflación acumulada en los últimos tres años se aproxima al 20%, y solo la canasta de alimentos acumuló más de 30% de variación en los últimos tres años.
En lo que respecta al rubro de frutihortícolas, el reporte del BCP indica que desde octubre del 2023 a junio del 2024 se acumula una variación del 34%. Entre los productos que más se encarecieron resaltan el tomate, zanahoria, locote, cebolla y otros. Estos fuertes incrementos en el rubro volátil están relacionados con un problema de oferta por dificultades en la producción relacionado al clima y por trabas para la importación de algunos de estos bienes.
Bienes alimenticios tuvieron una reducción
Mora detalló que los bienes alimenticios tuvieron una reducción, particularmente los productos cuyos precios se incrementaron fuertemente en los últimos meses (frutas y verduras), aunque los precios siguen altos respecto a un año atrás. También indicó que existe una reducción en el precio de la carne vacuna, huevos y otros rubros.
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“Hay productos alimenticios que han reducido sus precios, pero con eso no decimos que los hogares recuperaron su poder adquisitivo. Lo que se está viendo es una estabilización de los precios pero todavía en niveles altos, explicó.
También indicó que aún no se puede reflejar la variación de precios en ciertos sectores, principalmente asalariados u hogares con ingresos bajos. “Hay que entender que los precios no están fijos, y que están sujetos a factores que afectan su oferta o, en el caso de frutas y verduras, donde los efectos climáticos produjeron una escasez y aumentaron de precio”, indicó.