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La Caja Fiscal está compuesta por seis sectores: empleados públicos, magistrados judiciales, docentes universitarios, militares, policías y maestros, con un total de 73.589 beneficiarios entre jubilados y pensionados.
Hasta agosto último, el grupo de los sectores con superávit estaba integrado por empleados públicos, magistrados judiciales y docentes universitarios; en tanto que en el grupo con déficit se encontraban policías, militares y maestros.
Al cierre del noveno mes del año, sin embargo, se sumó al último grupo el sector docentes universitarios, teniendo en cuenta que terminó con un déficit de G. 340 millones, que equivale a 0,2%.
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Con el resultado entre enero y setiembre se mantienen con superávit empleados públicos (92%) y magistrados judiciales (32%), mientras que con déficit se encuentran docentes universitarios (0,2%), policías (62%), militares (72%) y maestros (38%).
Para financiar el saldo rojo de docentes y maestros se utilizan las reservas de la Caja, mientras que para cubrir el de las fuerzas públicas se utilizan directamente recursos recaudados a través de los impuestos que paga la ciudadanía, que se estima llegan a unos US$ 200 millones al año.
Resultado global de la Caja Fiscal
El informe del MEF da cuenta de que al mes de setiembre el resultado global de la Caja Fiscal arrojaba un déficit de G. 780.117 millones (US$ 105 millones), que equivale al 22% de diferencia entre los aportes ingresados y los beneficios pagados.
La caja arrastra déficits desde el año 2015, luego de que empezaron a aprobarse más de 12 leyes que establecen regímenes especiales y que distorsionaron y perforaron las medidas implementadas mediante la reforma de la ley en 2003.
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El Ministerio de Hacienda, en su momento, y hoy el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF), así como analistas del sector privado y estudios de organismos financieros internacionales, vienen advirtiendo que si no se introducen reformas para que las finanzas de la caja pueda volver en el futuro a ser sostenible, en pocos años más se utilizará toda la reserva y el Tesoro Público tendrá que encargarse de subsidiar el 100% del déficit.
Las autoridades del gobierno anterior habían declarado que si esto sucede exigiría una importante inyección de fondos de impuestos, que estimaron en unos US$ 500 millones al año.
A pesar de este panorama, los proyectos de reformas no avanzan, pero mientras continúa el deterioro de las cuentas.