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En los últimos 10 años, los números dan cuenta que se han incrementado los cotizantes en 35% en el Instituto de Previsión Social (IPS), así como los ingresos, en 112%. Sin embargo, los resultados se vienen reduciendo, producto de un mayor número de beneficiarios (74%) que se traducen en gastos ascendentes (192%). Así lo destaca un estudio del Observatorio del Gasto Público de Desarrollo en Democarcia (DENDE), dado a conocer el fin de semana. La citada consultora viene publicando una serie de notas sobre análisis de todo el sistema previsional paraguayo.
Los cotizantes titulares del Instituto de Previsión Social (IPS) se encuentran categorizados, según correspondan, en el régimen general (salud y pensiones), el especial (salud o pensiones), o el régimen especial no contributivo (excombatientes y herederos). Estos alcanzaron un total de 888.736 personas al cierre del 2022, que significó un aumento del 34,6% en relación al 2013, año en que se registraron 660.202 aportantes, señala DENDE.
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Agrega que los aportes para el Fondo de Jubilaciones del IPS, que representan el 54,35% del total de las recaudaciones, aumentaron para el 2022 (G. 4.086.143 millones) en 2,1 veces, equivalentes al 112%, comparado con los aportes del 2013 (G. 1.929.972 millones).
Ingresos aumentan pero escasamente
Según el estudio, un hecho llamativo es que el IPS registró un aumento de 3,8 veces más de aportantes al comparar con la Caja Fiscal, mientras que los ingresos se incrementaron solamente en un 27% en el 2022. Esto podría significar una evasión bastante importante dentro de su administración, que pone en riesgo su futura sostenibilidad.
Los beneficiarios del IPS totalizaron 71.330 personas en el 2022 que, al comparar con los datos del 2013, se observa un aumento del 80% en la cantidad de beneficiarios.
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Entre los beneficios que el IPS brinda se incluyen los que se otorgan por vejez (que considera los regímenes de jubilación ordinaria, proporcional y extraordinaria), los que se dan por invalidez, y los beneficios entregados a los derecho-habientes (por fallecimiento), entre otros.
Considerando los montos en concepto de pago a los jubilados, DENDE encontró que éstos también registran aumentos, pasando de G. 1.215.489 millones en el 2013 a G. 3.553.339 millones para el 2022. Esto representó un incremento de 192% entre ambos valores.
El Fondo de Jubilaciones del IPS cuenta con un resultado superavitario hasta la fecha, aunque sus valores continúan reduciéndose año tras año, atendiendo también en parte a la relación de cotizante/beneficiario, que continúa disminuyendo en detrimento del Fondo.
Deben haber reformas
Dadas las cifras, que reflejan un aumento en el numero de beneficiarios y la tendencia descendente en los resultados principalmente, es prioritario avanzar en la discusión del futuro en materia previsional, ámbito en el cual se debe contar con la participación de todos los actores relevantes, incluyendo al Gobierno, empresas y ciudadanos, para impulsar de esta manera los cambios que permitan una mejor sostenibilidad del sistema de jubilaciones, considerando también el inminente envejecimiento de la población en el mediano plazo. De esta manera, estaremos previendo todas las situaciones y evitando contingencias en el mediano y largo plazo, puntualiza el estudio.
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Reforma de la Caja Fiscal y de sistema de IPS
Tal como se mencionó en el informe previo del Observatorio de Gasto Público de DENDE, cerca del 30% de la Fuerza de Trabajo y del 31,8% de la población ocupada se concentran en la Caja Fiscal del Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) y en el Fondo de Jubilaciones del IPS como aportantes a un régimen de jubilaciones. Entre ambas ocupan un gran porcentaje del sistema previsional del país. De ahí la necesidad de analizar cómo se encuentran ambas cajas y de plantear las reformas correspondientes antes de que el sistema colapse, alerta la consultora citada.