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A un total de G. 49.051 millones (equivalentes a US$ 6.831.639 al cambio de G. 7.180) ascienden las pérdidas monetarias de la ANDE a causa del uso intensivo de electricidad realizado por 12 criptominerías. Estas fueron intervenidas o desconectadas entre los años 2022 y 2023, según el jefe de división de gestión de pérdidas eléctricas, dependiente de la Gerencia Comercial de la ANDE, Ing. Nicolás Rojas.
Detalló que 10 criptominerías intervenidas, que utilizaban 38,2 GW/h en total, generaron una pérdida por G. 20.281 millones. Asimismo, otras dos criptominerías desconectadas, que utilizaban en total 46,1 GW/h, perjudicaron a la empresa estatal de electricidad por G. 28.769 millones.
Verificaron más de 120 suministros de ANDE
“Los datos corresponden a los periodos comprendidos entre el año 2022 y 2023. Es ese periodo se verificaron más de 120 suministros con sospechas de hurto de energía eléctrica para la actividad de minería de criptomonedas”, contó el funcionario.
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Aclaró que la intervención del suministro se realiza únicamente si en el momento de la verificación se comprueba la flagrancia de la comisión del hecho punible, donde la participación técnica deriva a la jurídica, que con otros recursos busca detalles de cómo se está cometiendo el hecho de robo.
Dos tarifas al medir el hurto
“Es importante señalar que la tarifa que regula el grupo de consumo intensivo especial entró en vigencia a partir del 29 de diciembre de 2022, por lo que cálculos anteriores se realizan con tarifas convencionales con bases de cálculo más conservadoras”, añadió.
Sobre este punto, especificó que en el total de las 12 criptominerías intervenidas y desconectadas están mezcladas las dos tarifas, las de antes y las que rigen desde finales del año pasado. “En la tarifa general, son 10 horas de uso, y en la especial son 24 horas de uso, con modulaciones diferentes y entonces te da una diferencia muy importante, aparte del kilovatios-hora”, puntualizó.
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La intervención más reciente fue en Alto Paraná, en donde se cuantificó un daño patrimonial de G. 1.200 millones por el uso de 1,8 GWh, comentó el ingeniero Rojas.
Robaban el equivalente al uso de una ciudad
El mes pasado, la ANDE reveló que el robo de dos criptominerías ilegales equivalía al uso de electricidad de 16.000 clientes residenciales. En la criptominería de Itakyry (intervenida el día 22 de marzo del año en curso), encontraron que tenía una potencia instalada de 5 MW. Y la “granja” de Coronel Oviedo (intervenida el día 23 de marzo) contaba con una potencia instalada de 3 MW, igual al consumo de 6.000 clientes residenciales.