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La población en situación de pobreza monetaria extrema es el conjunto de personas que viven en hogares cuyos ingresos per cápita son inferiores al costo de una canasta básica de alimentos, explica Iván Ojeda, titular del Instituto Nacional de Encuestas.
Respecto a la pobreza extrema, manifiesta que el resultado es de un cambio de 3,9 a 5,6 por ciento.
“Los pobres extremos en áreas urbanas son los que no llegan a G. 11.500 por día y en la zona rural los que no alcanzan los G. 10.539 por día” señala Ojeda.
Respecto a los que preocupan el rango de pobreza total, indica que son los que no alcanzan, en zonas urbanas G. 27.500 por día y en zonas rurales a G. 19.930, por persona y por día.
Según el análisis, muchas personas que formaban parte del rango de pobreza, ahora pasa al de pobreza extrema.
En el 2021 existían 1.950.000 personas en pobreza, sin embargo, según el último estudio, actualmente son 1.800.000. “Hay menos personas en pobreza total, lo que sí hubo es una movilidad en donde se aumentó la pobreza extrema”.
Ojeda aclara que la pobreza extrema está contenida en la pobreza total, por lo que no se debe sumar ambas.
El análisis sobre pobreza extrema tiene su epicentro en las zonas rurales donde se pasó de un 7,7 a un 10 por ciento.
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“Si bien las personas mejoraron mínimamente sus ingresos, no lograron superar la barrera de la inflación”.
Otro factor determinante fue la sequía, indica Ojeda, además de la aparición de la mosca blanca que terminó con gran parte del cultivo de mandioca y autoconsumo.
Hoy, los pobres extremos son el 5,6 por ciento de la población, mientras que en cuanto a la pobreza total, de la que se podría decir que se registró un “estancamiento”, las personas en esta línea mejoraron sus ingresos y lograron rebasar la línea de la inflación.
Cabe mencionar que la pobreza monetaria total, que se obtiene de la suma de la pobreza no extrema y la pobreza extrema, registró una incidencia del 24,7% en el año 2022.
La incidencia de la pobreza monetaria extrema a nivel nacional en el año 2022 fue de 5,6%.
Costos de la canasta básica y el impacto de la inflación
Para establecer quienes son pobres y pobres extremos, tanto en la zona urbana como rural, se utiliza el valor de la canasta básica.
Según los datos proveídos se puede ver el aumento en los precios de la canastas con respecto al año anterior.
En la zona urbana, la canasta básica para establecer la línea de pobreza extrema es de G. 346.195, mientras que en el año 2021 estaba en G. 312.000.
La línea de pobreza total en la zona urbana tiene como índice de ingreso para poder adquirir esa canasta es de G. 825.000 este año y en el 2021 era de G. 771.000.
Se puede observar un salto en los costos de las canastas, por el impacto de la inflación.