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La movilidad eléctrica va aumentando en nuestro país tanto con las motocicletas y también automóviles que son ofrecidos por distintas marcas. Entre los usuarios de los vehículos que utilizan electricidad, el ingeniero Daniel Ríos compartió su experiencia con su moto tras los primeros 1.000 kilómetros de uso.
Además de su “hilo” en la red social Twitter, Ríos fue ampliando su decisión de comprarse una moto eléctrica en comunicación con ABC Cardinal, contestando una serie de preguntas al respecto.
Primeramente, explica que fue analizando comprar algún automóvil eléctrico, pero ante los altos precios aún en el mercado, optó por una motocicleta, atendiendo que su rutina diaria ronda por los 40 kilómetros.
En comparación a una camioneta que iba utilizando, que tenía un consumo de 12 litros por cada 100 km, ahora comienza a gastar G. 20 por cada kilómetro, por lo que mensualmente tiene un gasto de alrededor de G. 8.800 por su movilidad cada mes.
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Ahorro con la moto eléctrica
Ya considerando su cálculo, que no llega ni a los G. 10.000 por mes, el ahorro en su traslado diario es sumamente considerable, detallando que cada 40 kilómetros implican G. 800 con la tarifa residencial de la ANDE.
“Con el ahorro pago el préstamo que saqué para la moto. No es lo mismo andar en moto que en auto claramente, uno está expuesto y también es diferente el confort, esto no es un reemplazo, es un complemento y la camioneta queda para el fin de semana o paseo con la familia”, expresó.
Su motocicleta le costó G. 11.000.000 millones y su batería está preparada para una duración que se extiende hasta los 25.000 kilómetros. Atendiendo que este modelo no tiene una batería removible, cumpliendo su plazo, debería estar reemplazándola completamente.
En referencia a cómo cargar la moto, detalla que el consumo de su cargador funciona como cualquier otro electrodoméstico o como una notebook, dejándola enchufada por ocho horas para una carga completa.
“A mí me sirve por el rigor y las necesidades que tengo. En pago de electricidad no sentimos en mi casa hasta el momento una diferencia. Luego están otros gastos como habilitación o equipamientos como el casco, campera y guantes”, finalizó.
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