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El ministro de Hacienda, Óscar Llamosas, en conferencia de prensa anunció en la fecha los números con que cierra el presente año en materia fiscal y la expectativa existente en torno a 2023, en cuanto al crecimiento económico y presupuestario.
Llamosas presentó el último informe del año de situación financiera de la administración central acompañado de los viceministros: de Administración Financiera, Marco Elizeche; de Economía, Iván Haas; de Tributación, Óscar Orué; y del director de Política Macrofiscal, Rolando Sapriza.
El ministro explicó que el ingreso total llegó a más de G. 41 billones (US$ 5.598 millones al cambio vigente), lo que implica un aumento del 10,6% con respecto al ejercicio anterior.
Dijo que dentro de este grupo el ingreso tributario creció 13,5% y la presión tributaria se situó, por primera vez, en 10,4% del PIB.
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En cuanto a los gastos totales, indicó que el total asciende a más de G. 41,3 billones (US$ 5.640 millones), lo que implica un crecimiento de 5,9%, uno de los más bajos en los últimos años.
Añadió, que dentro de este grupo las remuneraciones se incrementaron 9,1%, principalmente por aumentos registrados en el sector docente y la contratación de personal de blanco; mientras que la inversión pública representó el 2,9% del PIB, unos G. 8,3 billones (US$ 1.203,3 millones).
El ministro hizo hincapié en que se cumplió con lo establecido en la ley de presupuesto de cerrar el ejercicio con un déficit del 3%, que representa unos G. 8,6 billones (US$ 1.247,6 millones).
El nivel previsto forma parte del plan de convergencia que contempla para el año venidero un saldo rojo de -2,3% y en 2024 volver al tope de -1,5% del PIB, como lo dispone la Ley de Responsabilidad Fiscal.
Deuda pública y deuda flotante
Sobre la deuda pública, el ministro anunció que se situará en 36,8% del PIB (unos US$ 14.721,8 millones), lo que es menor a lo que se tenía acumulado a noviembre equivalente a US$ 14.936,7 millones, 37,3% del PIB.
El viceministro Haas dijo al respecto que la reducción obedece a que se pagó deudas en este diciembre y ya no se registraron desembolsos, además indicó que en enero este ratio bajará al equivalente a 35,2%, atendiendo que se estima un crecimiento del PIB de 4,5%.
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Llamosas también mencionó que la deuda flotante o pendiente de pago de este año asciende a poco más de G. 1.5 billones (US$ 216,2 millones), que es menor unos G. 975.000 millones con respecto al año pasado.
Dejó en claro que la deuda se pagará en enero próximo con recursos del Tesoro y no se recurrirá a ningún adelanto de corto plazo del Banco Central del Paraguay (BCP).
Los compromisos pendientes incluyen remuneraciones que no se pudieron abonar porque las entidades presentaron muy tarde sus solicitudes, pago a proveedores y otros. En ese sentido, señaló que el 35% de estos gastos se financian con préstamos, el 24% con recursos institucionales y 42% con recursos del Tesoro.
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Al ministro se le consultó sobre la deuda pendiente con las empresas contratistas de obras que operan con el Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC), a lo que respondió que la entidad y otras entidades que también se encuentra en igual situación, deberá registrar contablemente y el plazo para abonar es hasta el 28 de febrero del año próximo.
Una vez que se registre se tendrá una información más precisa, afirmó e insistió en que, de todos modos, en los últimos tres meses al MOPC se le asignó cerca de US$ 270 millones para este fin, por lo que creen que gran parte fueron destinados a estos compromisos.