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Gremios vinculados al negocio del combustible expresaron su preocupación por el auge del contrabando del producto, y que les ocasiona pérdidas económicas por la disminución de las ventas en las estaciones de servicio.
El presidente de la Cámara de Distribuidoras Paraguayas de Combustibles (Cadipac), Miguel Bazán, indicó que el sector se encuentra “en un callejón sin salida”, pues los precios internacionales del diésel están subiendo y en los países vecinos están subsidiando el producto.
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Por lo tanto, los precios de esos mercados seguirán más baratos con relación al nuestro, explicó.
Además, no es sólo el contrabando “de hormiga” que golpea al sector, sino que son grandes infraestructuras que al parecer cuentan protección política. Días atrás, ABC recibió la denuncia de ordeño de combustibles en Paso de Patria, a plena luz del día y frente a la oficina de Migraciones, sitio que cuenta con vigilancia de la Policía y la Armada Paraguaya.
Guillermo Parra, de las Distribuidoras de Combustibles y Asociadas del Paraguay (Dicapar), indicó que el “ordeño” es una actividad criminal conocida.