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Esta semana vence el plazo de postergación del proyecto de Ley de actualización de haberes jubilatorios del funcionariado público presentado por el senador Martín Arévalo (ANR ), plan que de aprobarse requerirá una inyección de recursos del Tesoro por US$ 422 millones solo en el primer año de implementación.
Al respecto Pedro Halley ex gerente de prestaciones económicas del Instituto de Previsión Social (IPS) mencionó que ningún sistema en el mundo contempla tan beneficio pretendido por los jubilados de la Caja Fiscal. “Ni en Singapur o Suiza podemos ver un esquema de esa magnitud”, expresó Halley a nuestro diario.
En la práctica lo que este proyecto de ley pretende es actualizar el haber jubilatorio al personal activo de servicio. Es decir, que un jefe que se jubiló con G 5.000.000 pero en la actualidad ese personal del mismo rango percibe 8.000.000, entonces se le equiparará a los valores actuales. “Es una locura esto, más aún considerando la situación financiera de la Caja. Es puro populismo, lo que hará es acelerar el default o quiebre de la Caja Fiscal” advirtió.
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Reforma profunda y no más parches
El experto indicó que en el contexto actual de periodo electoral en el que estamos es difícil que un plan de reforma profundo que requiere el régimen de jubilaciones se lleve a cabo, por lo que finalmente se terminan aprobando soluciones “parches” y lo que este tipo de salidas lleva es a dilatar o llevar un poco más adelante el problema, pero no hay una solución de fondo y se termina perdiendo el tiempo entre un proyecto de ley y otro.
En ese sentido, sobre una propuesta de elevar el aporte del 16% al 20% consideró que solo sería un “parche” y que lo más recomendable es analizar una reforma más profunda y que no se termine metiendo a todos en la misma bolsa.
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Sugirió que en el momento de analizar estas reformas se deben estudiar los esquemas y las soluciones por separado ya que cada grupo tiene sus particularidades y sus propios problemas.
En ese sentido mencionó que de los 6 grandes rubros de la Caja Fiscal, 3 ya son deficitarios (maestros, policías y militares) y el resto (funcionarios públicos, magistrados judiciales y docentes universitarios) terminan financiado la diferencia de las jubilaciones del primer grupo, algo que es totalmente injusto.
Crisis ya está instalada
Halley acotó que la crisis ya está instalada, porque ya estamos financiando con nuestros impuestos las jubilaciones de los funcionarios en lugar que esos recursos se destinen a generar mejores servicios e infraestructura. En los últimos seis años, el déficit acumulado de la Caja Fiscal supera los US$ 670 millones y para el presente ejercicio se prevé de vuelta un saldo rojo de US$ 224 millones, que serán cubiertos con nuestros impuestos.
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Advirtió que el colapso en la Caja Fiscal terminará arrastrando a los demás fondos jubilatorios que también están con déficit como la Municipal, Parlamentaria, Ande y Cajubi. En caso de las dos últimas son absorbidas por las patronales.
¿Qué pasará cuando en algún momento se apruebe una ley que prohíba usar los impuestos para pagar jubilaciones? Quien absorberá esa diferencia? Se preguntó a lo que añadió que no es descabellado pensar que IPS tenga que salir a auxiliar, afectando también las jubilaciones futuras.