Sharapova, ganadora de Roland Garros y número uno de la clasificación mundial, había alcanzado la final del año pasado, que posteriormente perdió, tras ganar a Lisicki, 15ª jugadora del mundo, en semifinales.
La rusa, después de reconquistar el número uno tras el Grand Slam francés, el único que le faltaba en su palmarés, tiene muchas posibilidades de perderlo en el ránking de la WTA que saldrá cuando finalice el torneo londinense.
“Es increíble, aproveché la oportunidad. Este es mi torneo favorito, adoro jugar en hierba y me encanta el público de aquí. Progreso en cada partido”, declaró la alemana, de 22 años, al final del choque.
Sharapova, de 25 años, buscaba en esta edición de Wimbledon su segunda corona en Londres, después de la que logró en 2004, cuando sólo tenía 17 años.