El tenista de origen serbio, de 23 años, alcanza así la segunda final de su carrera en un Másters 1.000, tras haber perdido el año pasado la de Montreal contra el español Rafael Nadal.
Apoyado en un demoledor servicio -hoy sumó 12 directos y supera en lo que va de temporada los 1.000, 75 de ellos en Bercy-, Raonic tratará de convertirse en el primer tenista nacido en la década de los 90 que gana un Másters 1.000.
Ya es el primero de su década que jugará el Másters de Londres, que reúne a final de temporada a los ocho mejores del año, y el primer canadiense que lo consigue.
La de Bercy será la tercera final que dispute esta temporada, tras ganar el torneo de Washington y perder en la de Tokio, contra el japonés Kei Nishikori.
Berdych se quedó a las puertas de la final del único Másters 1.000 que ha ganado en su carrera. Lo hizo en 2005, con 20 años y, desde entonces ha perdido otras dos finales, la de Miami en 2010 y la de Madrid de 2012.
Entró frío en la pista el jugador checo y muy centrado el canadiense, que, tras amenazar en el primer juego, rompió el saque de su rival en el cuarto, ventaja que supo mantener asegurando su saque hasta el final.
Todo lo contrario que en la segunda, donde fue Berdych quien quebró en el segundo para mantener la renta y apuntarse la manga.
La definitiva fue un compendio de igualdad, sin que ninguno de los dos tuviera ocasión de romper el saque de su rival hasta el duodécimo juego, en el que el canadiense lo logró para apuntarse el partido.
Raonic, que en cuartos de final derrotó al suizo Roger Federer gracias a su extraordinario servicio, se medirá en la final contra el vencedor del duelo entre el número uno del mundo, el serbio Novak Djokovic y el japonés Kei Nishikori.