Se enfrentará en la próxima ronda a otro español, David Ferrer (N.4), clasificado tras la baja del alemán Philipp Kohlschreiber, que según la ATP sufre “vértigos”.
Nadal fue de menos a más ante Gulbis, que incluso llegó a disponer en el primer set de una bola para sellar un 6-0. Finalmente el letón ganó 6-1 y luego el español remontó en las dos siguientes mangas.
“Sigo todavía con vida tras un partido muy duro. Es fantástico estar en cuartos, tuve un sorteo difícil”, comentó Nadal, ex número uno mundial caído al quinto puesto ATP tras una larga lesión.
Si Ferrer le espera en cuartos, en unas eventuales semifinales el rival sería el número uno mundial, el serbio Novak Djokovic.
Ferrer sólo ha ganado a Nadal una vez en dieciséis partidos en tierra batida y fue en su primer enfrentamiento, en 2004, cuando el mallorquín todavía era una joven promesa.
“Tras seis o siete meses fuera de la competición, ser número 5 es un milagro. Podría haber sido el número diez. Acepto esta situación. Lo que cuenta es que soy segundo en la Race”, dijo Nadal, en alusión al ránking paralelo con los resultados del año.
“Siete finales seguidas, estoy más que satisfecho con lo que he conseguido tras mi regreso. Lo único que cuenta para mí es tener buena salud”, aseveró.
Nadal también destacó el gran partido de Gulbis, un hombre que acostumbra a ponerle en problemas.
“Es un jugador fantástico, sólo necesita tranquilizarse un poco en la pista. Pide demasiado a menudo al árbitro que baje a ver las bolas que yo anuncio como falta. Si yo digo que es falta, es que es falta. Si lo hace (tranquilizarse), tiene muchas opciones de lograr grandes victorias”, estimó la estrella del tenis español.