Nishikori, quinto jugador mundial y primer cabeza de serie del torneo catalán, certificó en una hora y 17 minutos su pase a la final ante el 28º clasificado en el ranking ATP, el eslovaco Martin Klizan, al que arrolló por 6-1 y 6-2.
Será por tanto la segunda final consecutiva en Barcelona para el tenista nipón y partirá en ella como claro favorito, después de la derrota de David Ferrer, octavo del mundo y tercer cabeza de serie.
Andújar, 66º de la ATP, eliminó a Ferrer al superarle por 7-6 (8/6) y 6-3, apenas un día después de haber dejado fuera al italiano Fabio Fognini, que venía con la moral al máximo tras ganar el jueves al ídolo local, Rafa Nadal, ocho veces campeón en la pista barcelonesa y que fue la gran decepción de esta edición, al quedarse fuera en los octavos.
Nishikori, tras su cómodo triunfo este sábado, dijo estar pensando ya en la final del domingo. “Hoy jugué muy bien y estoy contento por ello, pero si quiero ganar la final mañana necesito mantener la concentración y no cometer errores. Andújar ya me ganó hace dos años en Madrid”, recordó.
Andújar se mostró ilusionado con ser el campeón del torneo, después de ganar a Ferrer por primera vez. “Este ha sido uno de los mejores partidos que he disputado en mi carrera”, aseguró.
“Intenté presionarle con su segundo servicio y subir a la red siempre que pude. Al final fue una combinación de mi buen juego y de algunos errores suyos en el inicio del segundo set”, resumió.
Para la final ante Nishikori, Andújar espera contar con el apoyo del público de Barcelona, para poder recrear un ambiente similar a lo que sería un partido de la Copa Davis.
“Estoy inspirado. Creo que he trabajado duro y al final las cosas han salido bien. No hay mejor lugar para lograrlo que aquí en Barcelona. Espero que sea un ambiente como de Copa Davis. Espero que los aficionados lo den todo mañana. Les necesito porque Nishikori está jugando muy bien”, afirmó.
Andújar aspira a devolver la hegemonía española en este torneo. En los últimos doce años, sólo Nishikori en 2014 fue capaz de inscribir en el palmarés el nombre de un tenista no español.
El Torneo de Barcelona, de categoría ATP 500, se juega en tierra batida y reparte cerca de 2 millones de euros en premios.