En apenas una hora y media de partido, el mallorquín, campeón olímpico en Pekín-2008, se hizo con el triunfo en una cancha llena y con un público entregado a su causa.
Tras llegar empatados a dos juegos en el primer set, después de que ambos rompieran los servicios respectivos del rival, Nadal ganó los cuatro siguientes para cerrar la manga por 6-2.
Con la mitad del camino recorrido, el segundo set fue un paseo para Nadal (6-1) , que disputaba su primer partido desde que se vio forzado a abandonar el torneo de Roland Garros por una lesión en la muñeca.