Federer, que tiene la mejor marca de la historia de la ATP en los torneos Masters con 303 victorias, disputará su segunda final consecutiva después de haberlo hecho el pasado domingo en Toronto, y también será la sexta que dispute en Cincinnati.
Esta vez su rival será el español David Ferrer, de 32 años, sexto cabeza de serie, que también se impuso por 6-3 y 6-2 al francés Julien Benneteau, número 41 del mundo, que logró su mejor clasificación en un torneo Masters.
El duelo ante Federer, de 33 años, será el decimosexto, con marca de 15-0 a favor del exnúmero uno del mundo que ha recuperado su mejor nivel de juego como demostró ante Raonic, que sólo pudo aguantar en el campo una hora y nueve minutos.
Federer no pudo comenzar mejor el partido al romperle el saque a Roanic, el fuerte de su tenis, en el segundo juego y a partir de ese momento se puso con 3-0 y culminó el dominio con la segunda rotura en el octavo para el 6-2.
La superioridad de Federer fue completa en el primer set al ganar los 16 puntos de su saque, sin darle ninguna opción a Roanic para que pudiese reaccionar.
El tenista canadiense intentó la remontada en la segunda manga y aguantó su saque hasta el octavo juego cuando de nuevo surgió el toque magistral de muñeca de Federer y con su resto de revés cruzado hizo estragos hizo posible el pasar de 0-40 a romperle el saque a su rival.
Federer con su saque no hizo ninguna concesión y aseguró la victoria que le puso de nuevo a las puertas de lo que puede ser su sexto título en Cincinnati después de haberlo ganado en el 2005, 2007, 2009, 2010 y 2012.
El exnúmero uno del mundo, que buscará mantener perfecta su marca de finales y títulos ganados en Cincinnati, convierte al torneo en el séptimo en el que ha llegado a la gran final seis o más veces.
Por su parte, Ferrer, consiguió también su mejor clasificación en los 11 torneos de Cincinnati que ha disputado como profesional, y buscará su segundo título ATP en lo que va de temporada después de haber disputado tres finales y ganado la de Copa Claro, en Buenos Aires, que rompió racha de siete derrotas consecutivas en partidos por el título.
“Naturalmente que estoy en un gran momento”, declaró Ferrer al concluir el partido. “Será la primera final que dispute en lo que va de año en torneos de Masters 1000 y estoy muy feliz por eso”.
En cuanto al partido de la final, aunque todavía no conocía a Federer como su rival, Ferrer dijo que su filosofía siempre ha sido la de ir partido a partido, sin importar el rival.
Ferrer se acerca a llegar al selecto club de los 600 triunfos entre los jugadores en activo, algo que sólo han conseguido hasta ahora Federer, su compatriota Rafael Nadal y el australiano Lleyton Hewitt.
El jugador valenciano tiene marca de 591-285 y en lo que va de temporada ha conseguido 43 victorias, la tercera mejor marca, sólo superado por el propio Federer (47) y Nadal (44) .
Sin embargo, Ferrer tendrá que luchar de nuevo con la pesadilla de no haber podido ganar nunca a Federer, quien la pasada semana lo eliminó en los cuartos de final del torneo de Toronto al ganarle por 6-3, 4-6 y 6-3.
Dentro de la competición femenina, la gran final la disputaran la estadounidense Serena Williams, primera cabeza de serie, y la serbia Ana Inanovic, novena preclasificada.
El duelo entre ambas será el octavo, con ventaja de 6-1 a favor de Williams, que buscará su primer título en Cincinnati después de seis participaciones.