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El cuadro balcánico, impulsado por las gradas del pabellón Aleksandar Nikolic Arena de Belgrado, especialmente en el primer partido, atravesó la primera jornada de la eliminatoria sin dejar que los jugadores españoles ganaran un solo set.
Djokovic, sin síntomas de acusar la lesión en el codo que le apartó del Masters 1000 de Miami, superó a Albert Ramos por 6-3, 6-4 y 6-2. Después, Viktor Troicki batió a Pablo Carreño, número uno español, por 6-3, 6-4 y 6-3. Ninguno de los partidos alcanzó las dos horas de juego.
El retorno a las pistas del número dos del mundo careció de sobresaltos ante un rival que apenas le inquietó. Albert Ramos ni siquiera dispuso de una oportunidad para romper el saque de su rival en los dos primeros parciales. Le valió al serbio, que ya había ganado sin ceder un set al tenista español en los dos enfrentamientos previos que habían protagonizado –en los Masters 1000 de Montecarlo y de Indian Wells en 2015–, con quebrar el servicio de Albert Ramos una vez en cada uno de los dos primeros sets. Después le sirvió con sacar adelante los suyos para cerrar las mangas sin pisar el acelerador.
Djokovic impidió que Albert Ramos se metiera en el partido en algún momento. El español, de 29 años afronta en Belgrado su segunda experiencia en la Copa Davis tras la de su debut, en el 2013 contra Canadá, cuando perdió con Milos Raonic y ganó a Franc Dancevic en un duelo sin trascendencia.
Ramos, 24º jugador del mundo, finalista este año en Sao Paulo y con el título que logró en Bastad el pasado curso como único trofeo en su historial, intentó mantener el tipo y forzar a su rival en el tercer set, cuando se mostró más agresivo.
Fue en esta manga cuando Ramos, con 3-2 ya en contra, tuvo su primera ocasión de rotura, que Djokovic, ganador este año en Doha, terminó por solventar para disipar las dificultades que se encontró por única vez en el partido. Con 4-2 todo resultó más fácil para el jugador local, que cerró el partido y dio el primer punto a Serbia en Belgrado.
A continuación Troicki redondeó la jornada serbia. Carreño fue incapaz de plantar cara al número dos del cuadro balcánico, que cerró el compromiso por la vía rápida y después de una hora y 47 minutos.
El choque, el primero entre ambos jugadores, estuvo igualado hasta el octavo juego del primer set. Un mal juego de Carreño le costó la pérdida de su saque y un desequilibrio en el parcial que ya no fue capaz de enmendar. Perdió la manga.
Después la situación fue similar. La rotura del balcánico fue en el séptimo. Carreño intentó la reacción y tuvo 0-40. Fue lo más cerca del 'break' que estuvo el ibérico. Troicki logró cinco puntos seguidos, enmendó la situación y se apuntó el segundo parcial.
Pablo Carreño, finalista este año en Rio de Janeiro, acusó el bajón y perdió su saque en el arranque del tercero. Fue ya contracorriente Carreño, incapaz de arrebatar el servicio del serbio, que cerró el partido y logró el segundo punto a su equipo, a un paso de las semifinales.