El tenista de Belgrado, que se apuntó esta competición en el 2011, 2012 y 2013, tardó dos horas y dieciséis minutos en culminar su remontada ante el sudafricano, sexto del mundo y vencedor en Abu Dabi la temporada anterior.
Anderson, verdugo de Rafael Nadal en semifinales, tomó impulso gracias a la fiabilidad de su saque, que no perdió durante todo el primer set y gran parte del segundo. Eso le permitió adquirir ventaja. Ganó el primer parcial y tuvo opciones de triunfo hasta el décimo juego del siguiente.
Pero Djokovic rompió el servicio del sudafricano en el undécimo y equilibró la situación. El partido fue al último tramo, con Djokovic más cómodo y más certero que su rival. Tuvo ya dos puntos de partido con 5-4 que salvó Anderson. Pero no falló luego.
El tenista de Belgrado se mantiene inaccesible para el jugador de Johannesburgo. El europeo logró en Abu Dabi el noveno triunfo, en diez enfrentamientos, sobre su rival, que solo consiguió la victoria en el primer duelo entre ambos, en el Masters Series de Miami, en el 2008.
Novak Djokovic, que ha iniciado el ejercicio con similar solidez que la temporada pasada, irrumpe en el nuevo año con el triunfo en Abu Dabi y como el rival a batir. El Abierto de Australia es su primer gran objetivo.
Previamente a la final, el ruso Karen Khachanov consiguió el tercer lugar del torneo al batir al austríaco Dominik Thiem, sustituto de Rafael Nadal, por 6-3, 4-6 y 10-3.